Primavera Azul es un tomo que con la recopilación de una serie de relatos y un dibujo feista hace un retrato de una generación adolescente y rebelde de suburbio japonés. Una generación sin horizonte. Una generación atascada en el barrio, donde la vida y la muerte no tienen valor, donde se divierten con gilipolleces a falta de algo mejor y donde los hechos más dramáticos que a nosotros nos llenarían de ansiedad y a hollywood de un montón de thrillers, ahí, en esa realidad, no desencadena gran cosa. Tiene una narrativa muy oriental donde es más importante observar la vida que la adrenalina y plots twist. Es como si Yasujiro Ozu hubiese dirigido cine kinki.
No está hecho para todos, es una apuesta arriesgada, muy under con un estilo que se sale de lo canonico (más en occidente). A mí me ha gustado porque he visto en parte reflejada mi adolescencia y de alguna extraña manera me ha conmovido.