l Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) anunció el domingo que el número total de casos y de muertes a causa del nuevo brote se habían duplicado en los últimos 7 días. De los 14 Estados afectados, Tennessee continúa siendo el más mermado por la infección. En sus fronteras se han detectado 53 casos y han fallecido seis personas. Le siguen de cerca Michigan, con 41 casos y tres muertes; y Virginia, con 34 casos y una defunción.
«Como no conocemos con exactitud cuál es el periodo de incubación de la enfermedad, el Departamento de Sanidad sigue en contacto con las personas que han podido recibir el tratamiento médico en Tennessee», declaró a CNN el comisario de Salud del Estado de Tennessee, el doctor John Dreyzehner.
En total, entre mayo y septiembre casi 14.000 personas fueron tratadas en 76 centros médicos repartidos por 23 Estados con las inyecciones elaboradas por la misma compañía. Potencialmente, todos podrían haber recibido una dosis contaminada, lo que hace prever que el número de casos seguirá aumentando en los próximos días. Aún así, el haber localizado el foco del problema ha ayudado a las autoridades a contactar con diversos afectados y comenzar a tratarlos de forma temprana.
Según explica la Organización Mundial de la Salud, la meningitis es una infección bacteriana grave de las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal. Aunque sus variantes más frecuentes son contagiosas, el tipo de meningitis que está causando estragos en EE.UU. no lo es.
Primer caso en Tennessee
El primer vestigio de este brote fue detectado el pasado 18 de septiembre en Tennessee, donde un paciente fue diagnosticado de esta anómala variante de meningitis 46 días después de haber recibido una inyección epidural de esteroides. Nueve días después aparecieron ocho casos más. Todos ellos habían sido tratados con las inyecciones de esteroides preparadas por el Centro de Compuestos de Nueva Inglaterra (NECC). Esta farmacéutica está especializada en la elaboración de fórmulas magistrales, medicamentos preparados específicamente para un paciente o un tipo de paciente concreto, un campo que no está regulado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE.UU.
Tras una exhaustiva investigación las autoridades encontraron en las dosis restos de hongos, lo que llevó a la NECC a retirar todos sus productos del mercado y al cese de su actividad. Tras este escándalo, varios Estados y organismos oficiales planean demandar a la farmacéutica, ya que se han encontrado indicios de mala praxis tanto en la elaboración, como en la distribución de sus fármacos.