Una investigación profundiza en un fenómeno asombroso de la biología de las bacterias.
Al igual que los humanos, las bacterias viven juntas en comunidades, a veces ayudando a sus vecinas a prosperar. Conocer a fondo cómo interactúan las bacterias es fundamental para resolver problemas de gravedad creciente como el de la resistencia bacteriana a los antibióticos.
Ahora, el equipo de Eleftherios (Terry) Papoutsakis y Kamil Charubin, de la Universidad de Delaware en Estados Unidos, ha observado a unas bacterias hacer algo más que trabajar juntas. Células bacterianas de diferentes especies pueden combinarse en células híbridas fusionando sus membranas y paredes celulares, y compartiendo el contenido celular, incluyendo las proteínas y el ácido ribonucleico (ARN), las moléculas que regulan la expresión de los genes y controlan el metabolismo celular. En otras palabras, los organismos intercambian material y pierden parte de su propia identidad en el proceso.
Papoutsakis y sus colegas estudiaron las interacciones entre la Clostridium ljungdahlii y la C. acetobutylicum. Estas especies de bacterias trabajan juntas, produciendo cada una metabolitos que son beneficiosos para la supervivencia de la otra.
El equipo descubrió que la C. ljungdahlii invade a la C. acetobutylicum. Los dos organismos combinan sus paredes y membranas e intercambian proteínas y ARN para formar células híbridas, algunas de las cuales continúan dividiéndose.
A la izquierda, fusión celular entre la bacteria Clostridium ljungdahlii y la C. acetobutylicum vista a través de un microscopio de fluorescencia. A la derecha, formación de células bacterianas híbridas. (Imágenes: Kamil Charubin / Joy Smoker
"Mezclan su maquinaria para sobrevivir, y eso es algo extraordinario, porque siempre supusimos que cada uno de los organismos tiene su propia identidad y maquinaria independiente", destaca Papoutsakis.
Aunque este fenómeno de fusión bacteriana entre individuos de especies distintas se está dando a conocer ahora por primera vez, es probable que sea habitual en la naturaleza entre muchos pares de bacterias.
En cuanto al motivo de ese esfuerzo bacteriano por fusionarse, la respuesta simple es que probablemente compartir su maquinaria otorga al individuo de cada especie más probabilidades de supervivencia. (Fuente: NCYT de Amazings)
Impresionante, este descubrimiento no tendrá solo repercusiones en la lucha contra la bacterias resistentes a los antibióticos sino también es otro descubrimiento para descubrir el árbol evolutivo de las bacterias y de las arqueas.