Sabemos que la variabilidad en el sistema inmunológico humano puede hacer a unas personas más susceptibles de sufrir determinadas infecciones, pero aún conocemos poco sobre la variación genética de estos complejos sistemas defensivos.
Esta semana, un grupo de investigadores ingleses, estadounidenses e italianos, ha publicado en la revista Nature los resultados de lo que podría ser una explicación a esta desigual incidencia del virus de la gripe: una predisposición genética.
IFITM3 es una proteína que protege las células contra infecciones víricas y se cree que desempeña un papel fundamental en la respuesta del sistema inmune frente a virus como los de la gripe. Cuando la proteína está presente en grandes cantidades, la propagación del virus en los pulmones se ve obstaculizada, pero si la proteína es defectuosa o está ausente, el virus puede propagarse más fácilmente, causando una enfermedad grave.
Comparación entre ratones con el gen IFITM3 (columna izquierda) y ratones carentes de él (columna derecha). Un día después de la infección, las diferencias son mínimas, pero a los seis días, el virus ha penetrado más profunda y extensamente en el tejido pulmonar de los ratones carentes de IFITM3. Fuente: Trust Sanger Institute [doi:10.1038/nature10921
En pruebas in vitro, algunas proteínas del grupo IFITM (interferon-inducible transmembrane) son capaces de restringir la replicación de múltiples virus patógenos, incluyendo el de la influenza y el dengue. Esto llevó al equipo investigador a experimentar eliminando el gen de IFITM3 a ratones, encontrando que si éstos contraían la gripe, los síntomas eran mucho más graves que en otros ratones con el IFITM3 intacto. Los ratones sin IFITM3 padecían una neumonía viral fulminante al ser expuestos a virus normales con baja patogenia.
A continuación, los investigadores probaron el papel de la IFITM3 en la infección por el virus de la influenza humana, secuenciando el gen IFITM3 de 53 pacientes hospitalizados con gripe estacional o H1N1. Los resultados mostraron que una parte estadísticamente significativa presentaba una mutación del gen (SNP rs12252-C), la cual es rara en la población general. In vitro, esta variación del gen reduce la capacidad de la célula para restringir la replicación vírica, haciendo a las células más susceptibles a la infección.
La importancia de esta investigación consiste en comprender cómo una sola proteína antiviral puede marcar el curso de la infección en el organismo, al resultar un importante precursor en el desarrollo de una respuesta inmune efectiva. Concretamente, la IFITM3 es una proteína compuesta por 133 aminoácidos que se encuentra localizada en la membrana celular y que se encuentra ligada a diferentes mecanismos de respuesta inmune.
Aunque, según los propios investigadores, es necesario estudiar más a fondo los mecanismos de las diferentes variaciones génicas, estos resultados tienen un enorme valor a la hora de comprender cómo una sola proteína antiviral puede marcar el curso de la infección en el organismo. A medida que avance nuestro conocimiento sobre la genética de la susceptibilidad a los virus, se podrán adoptar medidas preventivas más eficientes y mejor dirigidas.