Traigo una noticia bastante interesante de microsiervos.En este caso sobre la sucesion de fibonacci. Tras la noticia pondré un poco de información sobre esta peculiar sucesion de números.
De kilómetros a millas gracias a la secuencia de Fibonacci
Tal y como cuentan en Futility Closet, resulta que la secuencia de Fibonacci se puede usar fácilmente para convertir de kilómetros a millas. Esto es porque casualmente la conversión entre millas y kilómetros se hace multiplicando por 1,60934… que es un valor muy cercano a al número áureo: 1,61803… Como los aficionados bien saben, la relación entre números consecutivos de la secuencia de Fibonacci tiende a 1,61803 a medida que se progresa en dicha secuencia, pero incluso para valores pequeños la aproximación es bastante razonable.
De este modo, basta buscar el valor aproximado a convertir en la secuencia (por ejemplo: 55 millas por hora) y el siguiente (89) será el equivalente en kilómetros… o al revés (el valor exacto de la conversión sería 88,5).
Nunca se sabe cuándo vas a poder necesitar esto, ¡pero bueno es saberlo!
fuente: http://www.microsiervos.com/archivo/ciencia/kilometros-millas-fibonacci.html
Un poco de información sobre la sucesión de Fibonacci
La sucesión inicia con 0 y 1, y a partir de ahí cada elemento es la suma de los dos anteriores.
Kepler describió los números de Fibonacci, y el matemático escocés Robert Simson descubrió en 1753 que la relación entre dos números de Fibonacci sucesivos fn + 1 / fn se acerca a la relación áurea fi () cuanto más se acerque a infinito; es más: el cociente de dos términos sucesivos de toda sucesión recurrente de orden dos tiende al mismo límite. Esta serie ha tenido popularidad en el siglo XX especialmente en el ámbito musical, en el que compositores con tanto renombre como Béla Bartók, Olivier Messiaen y Delia Derbyshire la han utilizado para la creación de acordes y de nuevas estructuras de frases musicales.
Los machos de una colmena de abejas tienen un árbol genealógico que cumple con esta sucesión. El hecho es que los zánganos, el macho de la abeja, no tiene padre (1), pero sí que tiene una madre (1, 1), dos abuelos, que son los padres de la reina (1, 1, 2), tres bisabuelos, ya que el padre de la reina no tiene padre (1, 1, 2, 3), cinco tatarabuelos (1, 1, 2, 3, 5), ocho trastatarabuelos (1, 1, 2, 3, 5, 8) y así sucesivamente, cumpliendo con la sucesión de Fibonacci.
Su representación gráfica es la siguiente: