La Fosa de las Marianas, situada en el océano Pacífico y considerada el lugar más profundo del planeta, no es un inhóspito lugar marino. Al contrario de lo que pueda parecer, esta cicatriz de 2.550 km de longitud y que alcanza los 11 km de profundidad (el monte Everest podría introducirse dentro), está repleta de vida, a la vez que alberga algunos de los misterios más inquietantes de la vida natural.
Lo han venido demostrando diversas investigaciones realizadas en la zona durante los últimos años, como la llevada a cabo por científicos daneses cuando consiguieron descender un robot a sus profundidades, detectando una sorprendente y abundante actividad microbiana en los sedimentos de fondo. Ahora, un nuevo estudio organizado por The Journal of the Acoustical Society of America y al que hemos seguido la pista a través del periodista, divulgador y Premio Bitácoras Antonio Martínez Ron, ha dejado patidifuso a la comunidad científica. En el mismo aparece recogido el análisis de un sonido tan extraño como inquietante registrado por varios vehículos que exploraron la fosa en varias ocasiones entre el otoño de 2014 y la primavera de 2015:
Pero lo más sorprendente de todo es que, según los promotores del trabajo, y tras el análisis pormenorizado de la frecuencia de este sonido de 3,5 segundos de duración y que oscila entre los 38 y los 8.000 hertzios, el origen podría ser una fuente biológica y más concretamente el de una ballena enana o alguna especie aún por conocer aunque llama la atención que el rugido ha sido detectado todo el año cuando estos animales únicamente lo usan en periodos de apareamiento. El misterio está servido.
No se que coño puede ser, pero suena inquietante, verdad? xD, vosotros que opinais?