En ese periodo, según asegura este organismo de Naciones Unidas, se han evitado unas 13,8 millones de muertes gracias a las campañas de vacunación. Además, el número de casos también ha descendido un 77%, pasando de 853.480 a 226.722 contagios.
La cobertura mundial de vacunación se ha mantenido estable en este periodo, y mantiene inmunizado al 84% de la población, gracias a que 145 países han incluido una segunda dosis de la vacuna para asegurar la protección y prevenir brotes. Además de la vacunación rutinaria, 145 millones de niños fueron protegidos gracias a diferentes campañas de vacunación masiva puestas en marcha en 2012.
Pese a estos datos, la OMS reconoce que el sarampión se está combatiendo de forma desigual ya que sigue habiendo grupos de población que no están protegidos, lo que impide la erradicación de la enfermedad.
De hecho, avisa de que sigue siendo una amenaza global ya que en cinco de las seis regiones que analiza esta institución se siguen detectando brotes y, en el caso de la región europea, no se han cumplido las previsiones de erradicación, algo que si se ha conseguido en la región americana.
Para conseguirlo, insisten en la necesidad de mejorar la cobertura vacunal para evitar que se produzcan nuevos brotes; en su opinión, si no se mejora la cobertura de inmunización a través de los servicios de rutina sanitarias, las campañas solas no podrán reducir los brotes, lo que dificultará los esfuerzos para alcanzar la meta de su eliminación global y prevenir más muertes.
Aunque, la cobertura y la asistencia de rutina, así como realización de campañas de vacunación de alta calidad requiere que los países le den prioridad al objetivo de su eliminación y, por lo tanto, invertir en mejorar sus actuales sistemas de salud.
La iniciativa contra el sarampión y la rubeola fue puesta en marcha en 2001, por la asociación liderada por la Cruz Roja Americana, la Fundación de las Naciones Unidas, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU, UNICEF y la OMS.
Esta iniciativa se compromete a garantizar que ningún niño muera a causa de la enfermedad ni nazca con un defecto congénito a causa de la rubeola; asimismo, pretende reducir las muertes por sarampión en un 95% en 2015 y la eliminación del sarampión y la rubeola en al menos cinco regiones en 2020.
Durante el año 2012, el mayor brote de sarampión se registró en la República Democrática del Congo (72.029 casos), le sigue la India (18.668), Indonesia (15.489 casos), Ucrania (12.746 casos), Somalia (9.983 casos), Sudán (8.523 casos), Pakistán (8.046 casos), y Rumanía (7.450 casos). En Europa, tras Ucrania y Rumanía, el informe destaca tres países más Rusia como 2.123 casos reportados; reino Unido con 2.092 casos y España con 1.204 casos.
La OMS destaca China que ha informado de 6.183 casos, lo que significa un mínimo histórico después de una constante disminución anual desde los 38.159 casos reportados en 2010. Asimismo, señala que la Región de las Américas ha sufrido la eliminación del sarampión desde 2002 y Región del Pacífico Occidental está en camino de llegar a su meta.