En el año 1990, se obtuvieron ciertos resultados en el Liquid Scintillator Neutrino Detector (LSND) de Nuevo México, que evidenciaban un nuevo “sabor” de neutrino: el neutrino estéril. Hasta entonces, los neutrinos conocidos solo tenían tres “sabores”, que no son más que diferentes tipos que interaccionan con mayor facilidad con ciertos tipos de partículas. Estos tipos eran: Electrón, muón y tau, que reciben los mismos nombres que las partículas de materia ordinaria con las que interaccionan.
Pues si ya era difícil que estos neutrinos interaccionaran con la materia, el nuevo sabor “estéril”, lo tiene más difícil aún, hasta llegado un punto en el que sólo pueden ser detectados mediante sus interacciones gravitacionales. Este es una de las cosas interesantes sobre este sabor, y es que demostraría una clara relación con la materia oscura, ayudando a comprender su existencia..
Hasta entonces todo parecía indicar que estas partículas revolucionarían varios campos de la física moderna, pero todo se vino abajo cuando en 2007 se presentaron unos resultados del proyecto MiniBooNE llevado a cabo en el acelerador de partículas Fermi, en los cuales no se había hallado evidencia alguna de esta extravagante partícula. Desde su publicación, los neutrinos estériles dejaron de tenerse en cuenta en el panorama científico.
Pero… ¿Se habrán equivocado al descatalogar tan rápido este tipo de neutrino? Eso es lo que pensaron en el equipo del LSND, por lo que empezaron a utilizar antineutrinos (La partícula contraria al neutrino, perteneciente a las antipartículas, pero de funcionamiento análogo) en sus experimentos, a lo que el equipo de MiniBooNE respondieron repitiendo sus experimentos con el mismo método.
Los nuevos resultados empezaron a surgir de entre las piedras. Se observó un comportamiento muy extraño por parte de los antineutrinos, que pasaban de ser neutrinos muón a neutrinos electrón a una velocidad mucho más alta de lo esperado. La forma para explicar este suceso, sería afirmando que el antineutrino muón se transforma primero en un neutrino estéril, para luego convertirse rápidamente en uno del tipo electrón. Esto es realmente extraño, ya que según se tiene entendido, las propiedades de la materia y la antimateria son análogas; una es el reflejo de la otra. Pero en este caso, parece ser que no funcionan igual, ya que los neutrinos de materia ordinaria no llegan a adquirir el sabor estéril, mientras que los antineutrinos sí.
Diferencias entre los dos tipos de materia como es la que presentan los neutrinos estériles, son las que podrían explicar uno de los grandes enigmas de la física actual, y es saber por qué en el Universo ha reinado la materia sobre la antimateria, lo cual es un incentivo interesante para seguir investigando estas extrañas partículas que parece que vuelven a tener un sitio entre las mentes de los físicos de hoy en día.
Fuente: Lacajarota.com
Noticia redactada por mí en el mismo blog. Información extraída de Newscientist.com
Interesante, no sabía hasta que vi esta noticia el tema de los sabores de neutrinos, y menos aún la existencia de estos esquivos neutrinos estériles. Creo que pueden ser una pieza clave, tanto para demostrar la existencia de materia oscura (ya que supuestamente, su comportamiento es similar a la misma) y explicar la diferencia de materia y antimateria. El tema ahora será conseguir observar estas esquivas partículas xD.