En simulaciones previas, se obtenía como resultado que la vía láctea debía tener cerca miles de galaxias enanas, sin embargo a la hora de hacer observaciones, solo se descubrían unas pocas.
En una nueva simulación, se ha determinado que esas galaxias llegaron a formarse, pero la mayoría fueron destruidas por completo al explotar una supernova dentro de ellas, lo que sí sería consistente con el número real que hay, y con el halo estelar que se observa al rededor de la vía láctea, que sería un cementerio con los restos de esas galaxias enanas destruidas.