Como habéis visto la gran mayoría en los telediarios, programas y prensa, Bardem se queda bien agusto con sus declaraciones a la revista de moda T Magazine.
‘Los españoles son duros. Critican mi trabajo y dicen que me he vendido. Quieres decirles: Dejadlo, ¡sois una panda de tontos!’.
‘No, nunca vas a gustar a todos -continúa.- Después de los Óscar volví a Madrid, donde resido. Quería volver al mundo real. Después de algo como los premios, has cambiado un poco, pero todos a tu alrededor han cambiado enormemente. Tienes que recuperarlos’, explica. ‘Tienes que demostrar que eres el mismo tipo tonto, limitado, que antes y no alguna especie de chico dorado’.
La fama no le ha afectado la vida demasiado. ‘Puedo ponerme un sombrero y gafas de sol y pasear por doquier’, dice. Sin embargo, le hacen preguntas ‘que invaden la intimidad. No entiendo por qué la gente necesita saber detalles personales de las vidas de otras personas,- se queja.- Está fuera de control. Para muchos, la prensa ahora es el enemigo’.[/i]