Man on the Moon me parece una gran película, un biopic sobre la figura de Andy Kaufman, humorista neoyorkino que revolucionó parte de la televisión y la comedia con sus actuaciones y performances artísticas, confundiendo a propios y extraños, cuestionando la delgada línea de ficción y realidad, de comedia o seriedad. Estrenada en 1999 fue un gran homenaje para uno de los grandes exponentes del movimiento de anti-humor pero no se ha sabido hasta ahora, a raíz del documental Jim & Andy (luego pongo el título completo por ser tan largo como genial), de que la verdadera película sucedía detrás de las cámaras pues Jim Carrey adoptó radicalmente la personalidad de Andy Kaufman, siguiendo interpretándole, o comportándose como él, después de que el director gritase "¡corten!" y se apagasen las luces del set, siendo problemático cuando su otro personaje, Tony Clifton, tomaba las riendas del cuerpo de Carrey.
Ver la película y después el documental es una gran experiencia, tan tronchante como reflexiva, donde en este último el actor reflexiona entre las muestras del metraje inédito sobre el concepto de identidad y los planos de existencia, entre otras cuestiones.
Man on the moon (1999)
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Cuando Andy Kaufman era un niño ya le gustaba organizar espectáculos de variedades, aunque no tuviera público. De adulto empieza a destacar como humorista y es descubierto por el cazatalentos George Shapiro, que le consigue un papel en "Taxi", una famosa serie de televisión, en la que, gracias a sus dotes cómicas, alcanza una gran popularidad. A pesar de ello, se plantea nuevos retos: con su colega Bob Zmuda crea el personaje de Tony Clifton, su "alter ego"; además, organiza espectáculos de lucha libre entre mujeres que le ocasionan numerosos problemas.
Jim & Andy: The Great Beyond - Featuring a Very Special, Contractually Obligated Mention of Tony Clifton (2017)
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Una mirada entre bambalinas de la película "Man on the Moon" (1999) de Milos Forman, y de cómo el actor Jim Carrey adoptó completamente y de forma radical la personalidad del cómico Andy Kaufman, registrado en aproximadamente 100 horas de material audiovisuales, grabados por la exnovia de Andy, Lynne Margulies y su excompañero de guion, Bob Zmuda, durante los cuatro meses del rodaje para un making of que nunca salió a la luz por orden de la productora, temerosa de que se catalogase al actor como un impresentable y un cretino. Dieciocho años después, Carrey comenta su experiencia y el viaje espiritual de su carrera.
