Emi, una profesora de secundaria, encuentra su carrera y reputación en peligro tras la filtración de una cinta sexual privada en Internet. Ganadora del Oso de Oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín y candidata rumana para los Óscar.
Vi esta película el otro día por casualidad porque venía de ver Titane, que me decepcionó, y bicheando descubrí que, de la misma manera que Francia enviaba a su titana a los Óscar, Rumanía hacía lo propio con esta, presuntamente más loca todavía.
Desde luego es una movida curiosa de peli. A caballo entre comedia dramática y ensayo sobre la hipocresía, pero también sobre la sociedad, política, religión... de la vida moderna rumana. Dividida en varias partes, cada cual con un tono completamente distinto (la peli juega mucho con el salto de géneros, nunca se toma a sí misma más en serio de la cuenta), nos va llevando de la mano por el peor día de la vida de la protagonista, y exponiendo las vergüenzas del puritanismo cristiano o el sistema educativo.
¿La recomiendo? Depende. Es algo así como si Buñuel y Godard se hubieran sodomizado mutuamente y hubieran parido un niño rumano con mala baba. No es una peli para todos los públicos (ya el inicio, con una escena de sexo no simulado de varios minutos) puede apartar a mucha gente de su visionado. Sin embargo, si compráis su premisa, podéis pasar un rato curioso. Ya solo por el hecho de que hayan tenido los cojones de mandar esto a los Óscar vale la pena darle un tiento.