2ª División "B" 2011-2012

El Orihuela arranca la Liga con fuerza (3-0)
Dani Gómez y Cases abren la cuenta del equipo amarillo

Debú goleador del Orihuela en Liga. Garitano dejó trazas de un equipo que tiene ganas de estar entre los mejores de la tabla y le colocó tres goles al Mestalla, el filial del Valencia, para abrir boca. El conjunto amarillo ha llegado con buen tono físico al arranque de la competición y desplegó ayer en Los Arcos el fútbol que le gusta al espectador oriolano, el de ataque, toque y rapidez, que augura buenas tardes en el recinto municipal.
El Orihuela comenzó con ganas. El equipo que dispuso el entrenador orcelitano empezó pronto a demostrar lo que ya anunció en la pretemporada, que su escuadra no quiere racanear fútbol. A la primera de cambio los amarillos colocaron tres disparos ante el meta del Mestalla, un equipo recién ascendido a Segunda B y plagado de jugadores de la cantera 'che'. La disposición táctica de los jugadores del técnico vasco mostraron sus ganas de mimar el balón. El centro del campo buscaba los pases a un rápido Cases, que llegó fino de forma a este primer partido.
En el primer cuarto de hora solo un centro chut de los valencianos puso en apuros a Unai Alba, el nuevo baluarte para guardar la meta de los amarillos procedente del descendido Hércules. Alba estuvo inseguro en una salida poco después en una falta escorada, que se fue a córner tras meter los puños. Acaso el exceso de responsabilidad pesó sobre el portero, consciente de que su fichaje debe aportar aplomo a la zaga escorpiona, que mantiene al veterano Benja como eje defensivo.
El Mestalla fue quitándose poco a poco la presión y comenzó a distribuir juego hacia sus puntas. Pero el Orihuela respondió rápido con un centro desde la banda derecha que no pudo rematar Cases al peinar in extremis un defensa blanco. A éste le siguió otro disparo de Dani Gómez, que buscó el hueco entre el primer palo y la manopla de Cristiano.
Justo en el minuto treinta Eldin, un examarillo ahora en el filial valencianista, falló un centro desde la izquierda. El extremo Salva Ruiz le puso un balón raso, exacto, que no pudo rematar con el interior del pie. Fue la ocasión más clara de los valencianos, un equipo joven y con ganas de mostrarse. Al fallo de Eldin siguió otro centro al que no llegó el ariete Paco Alcaser, otra promesa que apunta alto y que ha hecho la pretemporada con la primera plantilla de Unai Emery. Cuanto más asentado estaba el Orihuela llegó el primer tanto de los locales. Un pase largo y a media altura para Dani Gómez se convirtió en un balón dividido con el portero. Parecía que el meta valenciano llegaba con ventaja pero la rapidez del césped, regado para buscar más agilidad, hizo que se escurriera en el momento más inoportuno. El oriolano solo tuvo que driblar al meta, escorarse y empujar el balón a la red.
El Orihuela recuperó el dominio que había cedido en el medio del campo y supo administrar la renta del gol. Garitano desde la banda pedía calma para aguantar el resultado e irse a la caseta con un gol tranquilizador. Aún tuvo otra oportunidad rozando el descanso, que puso el segundo gol en la cuenta particular de Dani Gómez. Un bote alto que se tragó Cristiano le sirvió al ariete para peinar, esta vez por encima del portero, que salió de nuevo en falso. Este tanto hizo que los amarillos se fueran al descanso con una renta que hace vislumbrar un juego con gusto por el balón, los desplazamientos rápidos hacia los puntas y goles, que es lo que quiere un público acostumbrado al buen fútbol desde la temporada pasada.
En la segunda parte el entrenador valencianista, Vicente Mir, ajustó las líneas y metió a Joel y Cristian en busca de mejores ocasiones que en los primeros 45 minutos, donde el filial ché pecó de ingenuidad en la zaga. El Orihuela no movió el bloque inicial que dispuso Garitano en el minuto 1. El Valencia no tuvo más remedio que irse hacia arriba. Un fuera de juego fue la ocasión más clara de los hombres de Mir en los primeros diez minutos. Joel pegado a la banda derecha y un fallo clamoroso de Alcacer, que solo ante Alba echó el balón fuera fueron otras de las ocasiones. El Orihuela buscó el toque en el medio campo, para asegurar el buen resultado que logró en la primera parte. Buscó entonces rápidas salidas desde atrás, bien por las bandas o el centro, frenadas con faltas por los valencianistas, en sus mejores momentos.
El Orihuela logró su tercero en las botas de Cases. El menudo delantero, fino en este arranque liguero hizo dos recortes con giro en el punto de penalti en una baldosa y se giró mortal para enchufar el tercero al Valencia Mestalla. Un gol de salón que puso en pie a la grada de Los Arcos, que ayer vio fútbol de clase en su equipo. El equipo ecorpiión estaba crecido y siguió con ganas de goles. Cases bajaba a por más balones y Pelusa hizo lo más difícil, fallar el cuarto, tras regatear a todos los defensores que tenía por delante. Al final tiró alto por encima del larguero pero se llevó los aplausos de la grada. Respondió el Mestalla con un tiro en semifallo de Portu, que obligó a Unai Alba a estirarse a por un un balón al que se tiró de puños y sacó fácil. Acto seguido un córner bien bloqueado por el exherculano disipó el peligro. Incluso se permitió jugar de Benja y regatear después al ariete oponente.
El Valencia quiso parar con faltas hasta el final del partido a los oriolanos, que aguantaron bien los 90 minutos de su reencuentro con una afición, que disfrutó con su equipo.