Esta semana ha comenzado una nueva edición de la Euroliga de baloncesto, máxima competición a nivel continental.
Una competición que nuevamente quedará profundamente devaluada por la ausencia por motivos extradeportivos de los equipos rusos, grandes valedores de la misma.
Los CSKA, Zenit y Unics Kazán han sido sustituídos por el Virtus de Bolonia, el Valencia y el Partizán, además de perdurar los quince equipos que terminaron la competición la temporada pasada.
Así se conforma el único grupo de dieciocho equipos que disputan una liga a doble vuelta en 34 jornadas.
Es una competición que tiene dos fases muy diferenciadas que da lugar a dos vencedores. Una larga fase de liga que determina quien ha sido el MEJOR a lo largo de casi toda la temporada. Y despues una fase de play-offs y Final-four entre los ocho mejores para designar a quien le cuelgan el título de campeón de Europa. En la temporada pasada el mejor fué el Barça, el campeón el Efes turco.