Que vaya Cucurella y no Gayá es incomprensible. Lo lógico en circustancias normales es que fueran Grimaldo y Balde, pero es lógico que Balde llega demasiado justo, pero que vaya Cucurella, que da vergüenza ajena, antes que un jugador como Gayá, que ha demostrado regularidad siempre que ha jugado, no lo entiendo.
Pedro Porro es otro defenestrado sin sentido. Juega bien en el Tottenham, un equipo que ha luchado hasta casi la última jornada por ir a Champions en la Premier, y se lleva a Navas o Carvajal. No es que estos dos sean unos paquetes, pero amigo, que uno tiene 38 años y el otro 32. Ya debes ir pensando en ir actualizando la plantilla, y Pedro Porro te va a dar un rendimiento igual que los otros dos, e incluso ofensivamente diría que te da más.
De todas formas, más allá de decisiones concretas que uno puede preferir a uno u otro, lo que me da más pena viendo en general la lista es que el nivel general del fútbol español ha caído de forma drástica en la última década. Que arriba de lo mejor que tengamos sea gente como Morata, Ferrán, Joselu o Ayoze es triste, y en el mediocampo gente como Aleix García, Llorente, Fabián, Mikel Merino...
Hay otros jóvenes que dan algo de esperanza, como Pedri, Gavi, Nico Williams, Yamal o Baena, pero no creo que esta generación de jóvenes se vaya siquiera a acercar a la que tuvimos entre 2008-2014.
Es que el único español de toda la lista que se puede decir que claramente es top mundial en su posición ahora mismo es Rodri. Uno.