Hay dos faltas que derivan en el gol. La primera de ellas, en el tiempo reglamentario.
Se lanza esa primera falta y un jugador la intercepta con la mano. Por lo tanto pita otra falta y amarilla.
Se lanza la segunda falta y Albacar mete el gol.
Sí, era en el 94, pero no se jugó más allá del añadido, puesto que eran faltas.