#539 La agresividad y los mates no son algo estrechamente ligado por fuerza cuando mides 2.15.
Tomic es un pechofrío, un horchatero, como quieras llamarlo. Y encima de no tener sangre, no le sale de los cojones defender. Gracias a esto a conseguido perfeccionar muchísimo su nula defensa durante todos estos años.
Defensivamente se merece todos los reproches posibles porque no sólo lo empeora como jugador si no que perjudica también al equipo (bien cargándose de faltas, bien haciendo que su compañero de pintura tenga que trabajar el doble bajo su aro).
Por otro lado, en ataque el cabrón es muy bueno. Para el tamaño y envergadura que tiene está dotado con una mano y unos movimientos en el poste que otros no dominan con 10 cm menos. Tiene talento. Hay muchas situaciones en estático, jugando de espaldas, que resuelve él sólo sin que nadie venga a hacerle ninguna ayuda.
Al César lo que es del César. Pero habrá que ponerlo en su lugar, es el mismo jugador que el año pasado pero en un sistema que se adapta mucho más a él. Tapa sus carencias (el Barça defiende más que el equipo de Lolaso) y alza sus virtudes (juego en estático y tal Pascual)