El RCD Mallorca abandona definitivamente la tutela judicial. Al final de la temporada 2020-2021, el club balear saldó su deuda con Hacienda, poniendo punto final al concurso de acreedores que arrastraba desde 2010, según ha anunciado el propio club a través de un comunicado. De esta forma, la actual propiedad del club ha liquidado la deuda con el erario público después de años con restricciones que comprometían el futuro de la sociedad anónima deportiva (SAD) balear.
Después de cerrar la deuda concursal con los acreedores ordinarios hace cuatro años, en 2017, el club cierra ahora el capítulo definitivo con la Agencia Tributaria, limpiando cualquier tipo de deuda.
Desde su llegada en 2016 a la entidad balear, los accionistas del RCD Mallorca han inyectado en el club hasta 43 millones de euros, 25 millones de los cuales se han destinado a pagar la deuda del concurso de acreedores y a Hacienda. Para la próxima temporada, el club balear, que regresa a LaLiga Santander, prevé unos ingresos superiores a 50 millones de euros, además de estrenar patrocinador técnico tras la firma de un contrato de cinco años con Nike.