Hace unos días, en Las Palmas, se marcaba hoy como la fecha límite en la que se iba a anunciar el fichaje de Luis Carrión como nuevo entrenador. Sin embargo, todo lo que era certeza se ha mudado en incertidumbre, en especial tras la reunión del técnico con los dirigentes azules el pasado lunes.
Mientras desde Las Palmas se da por hecho el fichaje, en el Real Oviedo se confía en un cambio de planes del técnico y que acepte la continuidad con una ambiciosa propuesta en cuanto a cantidades económicas y el proyecto deportivo.
El entorno del entrenador ha pasado de dar por hecha su marcha con destino a Primera División a insinuar que seguir en Oviedo es su primera opción en estos momentos. En cualquier caso, lo que está claro es que hoy expira el plazo que la entidad azul concedió al preparador catalán.
Entre las conjeturas de los últimos días se ha deslizado que el entrenador, como él mismo aclaró el lunes, no ha firmado ningún contrato con el conjunto canario, pero que sí lo habría hecho su representante, Joaquín Vigueras. En ese caso se debería buscar la forma de resolverlo para poder seguir en Oviedo.
El entrenador trasladó a los dirigentes azules meses atrás que en Segunda solo entrenaría al Real Oviedo, pero que en el caso de que llegara un equipo de Primera se iría. Sin embargo, las cosas cambiaron sustancialmente.
Lo vivido en torno al equipo durante el último mes y la apuesta rotunda de Jesús Martínez han hecho que el técnico se haya cuestionado su planteamiento inicial. A todo eso hay que sumar que en el plano personal tanto el técnico como su familia están «encantados» en la ciudad.
En la última semana, con Jesús Martínez en la ciudad, se mantuvo contacto diario con Luis Carrión y la situación giró algo más hacia los intereses azules pero sin terminar de confirmarse.
En principio, la reunión con Las Palmas será hoy en Madrid y tras ella el técnico tomará la decisión y se la trasladará a las partes.
Al conjunto ovetense le urge tener la respuesta cuanto antes, ya que el propio presidente de Pachuca reconoció el lunes que no se habían planteado una alternativas, ya que confiaban en la respuesta favorable de Carrión.
Agustín Lleida y Roberto Suárez deberían buscar un recambio de forma inmediata para que, a lo largo de la semana, se pueda resolver la situación.
El perfil que debería está claro que sería similar al de Luis Carrión, un entrenador que apueste por el juego de ataque. Además, solo se plantean, por el momento, entrenadores que conozcan el fútbol español y tengan cierta experiencia, ya que el proyecto que se podrá a su disposición será de envergadura.