Es un proyecto de la división de datos e inteligencia artificial del gobierno de Singapur que fue creado en enero durante un hackatón. Sus creadores admiten que no es una idea nueva, pero dicen que este es el primer modelo entrenado para colorear fotos antiguas de Singapur, por lo que funciona especialmente bien.
Para llegar a este resultado, los investigadores desarrollaron una red generativa antagónica: una primera red neuronal predice los colores de la escena a partir de millones de parámetros matemáticos y una segunda red trata de averiguar si los colores son reales o falsos. Cuando la primera logra engañar a la segunda, el modelo se da por entrenado.
Para entrenar e este modelo se usaron 500.000 imágenes históricas de Singapur y un grupo de tarjetas gráficas NVIDIA V100 trabajando en serie. Más tarde, el sistema fue trasladado a la nube de Google, donde cuenta con varios clústers de tarjetas gráficas NVIDIA Tesla K80 para el trabajo.
La inteligencia artificial no puede adivinar los colores originales de la escena, lo que vio realmente el fotógrafo, pero hace un buen trabajo encontrando colores plausibles. Y lo hace endiabladamente rápido. La hemos probado con algunas de las fotos más famosas de la historia:
Cosas modernas:
Roma de Alfonso Cuarón
No es perfecta pero yo he pasado algunas antiguas de mi familia y han quedado bestiales en segundos.