Es la primera pantalla de estas características en el mundo: 3D y a 360 grados. No requiere ningún tipo de gafas estereoscópicas, tan sólo colocarse en medio de un cilindro en el que más de 50 mil LEDs van rotando a una velocidad de 1,6 revoluciones por segundo (los LEDs están colocados en columnas que van rotando).
Probablemente pasen aún mucho tiempo antes de tener un aparato de estos en el salón, pero es bueno ir conociendo el futuro.