Estábamos en octubre 2019.
Un cliente nos pide montarle un puesto de atención al cliente y gestionarle el personal en su centro (no quería ocuparse él). Contratamos a los empleados y vinieron a formación por la mañana y trabajar por la tarde del día de inauguración.
El centro tuvo bastantes problemas (fugas de agua, obras con defectos, etc) al haberlo construido con prisas y nos pidieron que dejáramos en standby el servicio hasta que pudieran acabar las reformas adecuadamente. Como el contrato estaba hecho y en teoría iba a ser cuestión de una semana o dos como mucho, nos siguieron pagando y por tanto nosotros también a los empleados, aunque no venían a trabajar.
Las obras se alargan más de lo previsto, luego llega navidad y su prioridad es otra así que pasan de nosotros. Enero, rebajas. Y después llega el covid.
Tienen que cerrar puestos de atención al público y mandan al ERTE a la mayoría de empleados. Como no pueden romper el contrato con nosotros nos siguen pagando cada mes, aunque acordamos una rebaja del 70% mientras no esté abierto por covid.
En resumen, varios emplead@s que trabajaron un día en octubre 2019 y desde entonces han cobrado su sueldo. Llegado marzo 2020 empezaron a cobrar el 70% de ERTE y así siguen hasta el día de hoy.