Muy guapas algunas historias del post!! Os voy a dejar a continuacion una sucesión de historias que han pasado a miembros de mi familia que viven en Guatemala y República Dominicana, en relación a espiritus y fantasmas... Son historias REALES que han VIVIDO familiares muy cercanos a mí (por suerte yo no)... Empezaré con algo que me contó mi tío cuando yo tenía aproximadamente 10 años (me impactó tanto que me acuerdo como si me lo hubiese contado ayer). Cabe destacar que le pasaron cosas tan fuertes que por mi corta edad decidió no contármelo todo, y prometió acabar de contármelas algún día; a día de hoy, a pesar de habérselo dicho más de una vez, no ha sido capaz de contármelas.
Cuando mi tío tenía 8-9 años vivía en Guatemala (su padre era consul allí), con su padre, su madre, su hermana, su hermano, y su nana. Vivían en una casa grande y antigua, de dos pisos, con suelos de madera y una decoración medio barroca.
Son diversos los escenarios en que toda la familia vivió aterrorizada; aquí os expongo algunos:
1.- Un día se hallaban todos comiendo al medio día en la mesa del comedor, cuando de pronto empezaron a escuchar pasos en el piso de arriba; pasos lentos, de lo que parecía una sola persona...pasos que poco a poco fueron haciéndose más rápidos; se empezaron a multiplicar como si de varias personas se tratara, todos corriendo de un lado al otro de la habitación, algunos incluso saltando (parecía que con maldad) contra el suelo del segundo piso de madera, sucediéndoles varias carcajadas estruendosas. El padre subió corriendo, dejando a la familia en la mesa, pero cuando subió y abrió la puerta de la supuesta habitación, no había absolutamente nadie, y todo estaba en orden.
2.- Otro día estaban todos desayunando abajo, menos la hermana, que estaba tomando una ducha (no, no tengo fotos). Ésta escucha que llaman a la puerta del baño, como si alguien quisiera entrar. Pregunta "Quién es?" pero nadie contesta. Vuelven y tocan, pero esta vez más fuerte; ella vuelve a preguntar un poco sulfurada que quién es, pero siguen sin contestar. De repente, los golpecitos se convierten en lo que parecían dos/tres personas golpeando y pateando la puerta, la chica desesperada llorando grita "Parad, paraaaad" pensando que eran sus hermanos gastándole una broma. En este momento el resto de la familia que está abajo escucha los fuertes golpes y a la chica chillando y corren en su ayuda. Cuando abren la puerta y la encuentran sentada llorando al borde de la bañera le preguntan que qué estaba pasando... Ella todavía llorando señala a sus hermanos y los culpa de haber estado molestándola y golpeando la puerta; momento en el cual el padre, pálido, muy serio, le dice que los niños estaban abajo tomando el desayuno con el resto de la familia.
3.- Como el padre de mi tío era Consul, el tema de la seguridad era primordial: había policías que rondaban la casa, a veces andaba con guardaespaldas, etc. Pero había algo rutinario que hacía siempre al llegar tarde a casa si estaban todos durmiendo. Éste se dirigía a la habitación de la Nana para avisarla de que había llegado y de que podía ir a cerrar todas las puertas y ventanas con seguro.
Una noche, el padre de mi tío llega, se dirige a la habitación de la nana, que estaba durmiendo con la luz apagada, y con tono tranquilo le dice "Esperanza (así se llamaba), acabo de llegar... Ya puedes ir a cerrar todo".
La nana entre sueños le dice "Está bien, señor, ahora mismo voy y cierro". Ésta decidió quedarse entre las sábanas 5 minutos antes de ir a cerrar, porque el sueño la invadía.
3 minutos después, tocan de nuevo a la puerta de su habitación, y con el mismo tono tranquilo, escucha en la oscuridad la misma voz que le dice "Esperanza, acabo de llegar... Ya puedes ir a cerrar". Ella le responde "Señor, usted hace 1 minuto ya me lo comunicó". A lo que él le contesta "Eso no es posible, yo acabo de entrar en casa apenas hace 30 segundos, y justo te lo acabo de decir ahora"... La nana se quedó pálida y sin rechistar fue a hacer su trabajo.
4.- Mi tío dormía con su hermano en la misma habitación, que se encontraba al final de un largo pasillo. Del otro lado del pasillo se encontraba el baño, y a mitad de éste, la típica luz antigua con una bombilla colgando, que se enciende tirando de una cadenita.
Cuando durantes las noches entraban ganas de ir al baño, era una odisea, pues siendo pequeño te da miedo la oscuridad y había un largo recorrido hasta la bombilla, y luego de vuelta a la habitación.
Hubo una de las noches en que mi tío se levantó a orinar, se dirigió hacia la bombilla, la encendió, y llegó hasta el baño, cerrando la puerta tras de sí.
Cuando acabó de orinar, abrió la puerta del baño y se encontró con que la luz del pasillo estaba apagada. Atemorizado porque era imposible que él hubiese apagado la luz, puesto que siempre la apagaba cuando volvía a la habitación, se acerca y la vuelve a encender; pero faltaba algo, tenía que devolverse a apagar la luz del baño. En el momento en que llega al baño y apaga la luz, escucha tras de sí como si alguien tirase de la cadenita de la bombilla del pasillo, y se apaga la luz.
Llega corriendo desesperadamente a su habitación, pensando que había sido su hermano gastando una broma, pero se lo encuentra totalmente dormido, y cuando lo despierta para preguntarle, éste le dice que no sabe nada, que estaba durmiendo.
5.- La casa estaba vigilada los fines de semana por 2 guardias que hacían turnos de 12 horas, de 7 a 7. A veces, el guardia sustituto llegaba 5 minutos después de las 7, por lo que quizás la casa quedaba sin vigilancia ese período de tiempo, lo que significa también que los guardias no se veían la mayoría de veces cuando intercambiaban turnos.
Un dia la familia decide irse a pasar el día a una ciudad próxima, saliendo a las 8 de la mañana de la casa, despidiéndose del guardia y deseándole buen día.
Todos pasan un día increíble fuera, y cuando son las 9 de la noche ya están llegando de vuelta.
Cuando se acercan con el coche a la entrada principal, el guardia (que era el del segundo turno) que los observaba de lejos sentado en su puesto, se levanta extrañado, y se acerca para ver quién es.
En este momento el padre baja la ventanilla y lo saluda; en este momento el guardia, confuso, se empieza a poner nervioso y pálido, y el padre le pregunta que qué le pasa. El guardia balbuceando le pregunta "Ustedes están llegando ahora? No estaban en la casa?" El padre le contesta que efectivamente habían salido por la mañana a pasar el día fuera, y que en ese momento estaban llegando... El guardia se pone aun más pálido y les dice que eso no es posible, ya que lleva todo el día escuchando una fiesta dentro de la casa, con música, gente hablando y riendo, y que había visto niños jugueteando y corriendo en el patio frontal.
Le aseguraron que ellos no estaban allá, y aquel guardia NUNCA MÁS volvió.
La familia de mi tío se mudó cuando por fin lograron vender el terreno, y todo volvió a la normalidad, hasta que un día recibieron una llamada de la constructora que les había comprado el terreno, diciendo que cuando habían derrumbado la casa habían encontrado emparedados los cadáveres de una familia, supuestamente asesinada por la mafia guatemalteca. Una familia igual a la de ellos... Padre, madre, dos niños y una niña.
Cuando sucedió esto mi tío tenía aproximadamente 10 años, pero para no traumatizarlo no se lo contaron hasta que no tuvo 16.
Tengo un par más, no tan escalofriantes, pero ya las contaré en otro post.
Espero que os guste!