El mal llamado "maltrato machista" es a las mujeres lo que Dios es a los creyentes: está por todas partes, es omnipresente y se puede manifestar en cualquier situación.
Estas páginas feminazis de supuestos machismos crean un efecto bola de nieve en la realidad que intentan transmitir una situación de absoluta urgencia y catástrofe, como si las mujeres estuviesen en peligro constante.
La más absuluta nimiedad, la cogen, la retuercen, la deforman, la exageran y la "escupen" con rabia convertida en un machismo asqueroso en la que el hombre es demonizado y ellas mismas se retrovictimizan.
Al final, alcanzan un fin terapéutico ya que inconscientemente es lo que persiguen: ser víctimas.
Las mujeres adoran el victimismo, siempre lo han usado, junto con el sexo, para conseguir cosas.
No obstante esto tiene su parte buena: Las feminazis no paran de cacarear sus gilipolleces, y la gente cada vez está más harta de ellas, y esto se nota cada vez más porque hilos como estos no se abrían en los foros en el 2006 y ahora sí.