Ayer por la tarde estaba en la biblioteca, hablando por mensaje privado con @rotulador11 , contándonos hazañas de aquí y allá y se me ocurrió ponerme el final del Padrino, de la tercera película.
Qué bonito y a la vez amargo es el final. Como consigue que empatices y sientas tristeza por un tío al que no le temblaba el pulso por matar a gente. Se me ponen los pelos de punta al recordar la escena final con la música de fondo y ver ese grito ahogado y esa soledad en la última etapa de su vida cuando le arrancan a la hija.
Me deja el cuerpo invadido de nostalgia por un pasado que ya no volverá.