Según la mitología griega, Zeus entregó a su hijo ilegítimo, Dioniso, al cuidado de Sileno, para protegerlo de la ira de su esposa Hera. Junto a él, Dioniso se crió en el monte Nisa, rodeado de sátiros y ninfas. Las características de esta escultura llevan a pensar que la pieza es una copia romana, de época imperial, basada en una escultura griega más antigua, del siglo IV a.C., realizada en bronce por Lisipo.
La obra de este escultor, una de las grandes figuras del momento de transición entre clasicismo y helenismo, se caracteriza, entre otras cosas, por adoptar un nuevo canon, más alargado que el anterior y por romper las barreras del espacio escultórico, invadiendo el plano del espectador y proporcionando vistas múltiples, alrededor de la escultura.
Copia de un original de Lisipo
Arte romano imperial. Siglo I – III a.C.
El original se conserva en el Museo del Louvre en París
Copia realizada, en 1930, por el Museo del Louvre de París