Bueno, míralo por el lado positivo... todavía te quedará el otro ojo y aunque no puedas percibir la profundidad de campo, siempre te guiarás mejor que siendo ciego. Al menos hasta que te detecten otro lunar o alguna historia en el otro ojo, que claro, si te ha salido en uno, por qué no iba a salirte en el otro. Pero yo que tu no me preocuparía demasiado, la vista está sobrevalorada, ahora tienes perros guía perfectamente preparados y lápices inteligente y demás.
Lo siento, quiero decir, ¡suerte!