[reto-mv] El hilo anual | [1] día

#14585 me explicas por donde introduces tu... ya sabes en una tortuga?

#14586 Me lo meto dentro de mi

D. Cuando se habla del 2500 como el año en que habrá de concluir la actual Quinta Raza,
¿debemos tomarlo como un número simbólico u obedece a alguna cronología?
M. Es simbólico, y por eso lo hemos citado en “La Doctrina Secreta de Anáhuac”. Es una
fecha simbólica que coincide con el momento en que se rasga el Séptimo Sello del Apocalipsis de
San Juan. Significa que se rasga el Séptimo Sello, porque 2 + 5 es 7. La humanidad ha rasgado 6
Sellos hasta la fecha actual; luego tiene que rasgar el Séptimo Sello, y se dice simbólicamente que
es en el año 2500, pero no hay que tomarlo literalmente, no. El comienzo de las catástrofes definitivas
está en el año 2043, porque el Katún-13 comienza en el 2043 (el Katún-13 de los mayas). Eso
está escrito y eso lo saben todos los sabios del Mayab. Le preguntaba yo a un anciano maya en
Palenque:
– “¿Tu hijo lo verá?”. Entonces el anciano contestó:
– “No, mi hijo no lo verá”.
– “¿Tu nieto verá el Katún-13?”. Contestó:
– “Mi nieto sí lo verá”...
El Katún-13 como los otros 12 Katunes, se cumplirá al pie de la letra. Cada uno de los 12
Katunes ha sido exacto; ninguno ha fallado. El Katún-13 entra por ahí por el año 2043. Ellos ponen
un promedio entre el 2040 y el 2043. Poco más o menos, eso le ponen los mayas al Katún-13.
D. ¿Qué es eso de “Katunes”?
M. Tienes que estudiarte el “Popol Vuh”, o el “Chilam Balam de Chumayel”; allí recibirás una
amplia información sobre los 13 Katunes. Es imposible que en una pequeña plática te concrete toda
la sapiencia de los 13 Katunes. Es difícil, ¿no? Ellos abarcan enormes extensiones de siglos, de
tiempo; es algo muy amplio.
D. ¿Cada 52 años se cumple un ciclo, según el calendario nahua?
M. No, ese es el ciclo de la “renovación de los fuegos”; cuando “el fuego viejo termina” y se
enciende un “fuego nuevo”. Esos siete ciclos, de 52 años cada uno, son muy exactos, pero esos a su
vez están relacionados con ciclos más grandes. La gente de esta época no ve sino los pequeños
ciclos de 52 años, pero, realmente, cada uno de los siete grandes ciclos corresponde a una raza, y 5

• 2 da nuevamente 7, el Séptimo Sello.
  De manera que, una cosa es la Primera Raza que hubo en el mundo, que fue la Raza Protoplasmática,
  y otra cosa es la Segunda Raza, la de los hiperbóreos; otra la Tercera Raza, la de los
  lemures; otra la Cuarta Raza, la de los atlantes, otra la Quinta Raza, la nuestra, y vendrá una Sexta
  y después una Séptima Raza. Pero, obviamente, esos son los Soles Nahuas: Primer Sol, por ejemplo,
  la Primera Raza; Segundo Sol, la Segunda Raza; Tercer Sol, Tercera Raza; Cuarto Sol, Cuarta Raza;
  Quinto Sol, la Quinta Raza, que somos nosotros: Los Hijos del Quinto Sol. De manera que, cuando
  se habla del Quinto Sol, se refiere a la Raza Aria. Los Hijos del Sexto Sol pertenecen a la "Resurre-
  ción de los Dioses” y los del Séptimo Sol serán los últimos, los de la Séptima Raza.
  De manera que, ahora estamos en el Quinto Sol. Por esta época es que se aguarda al Katún-
  13 de los mayas. La gran catástrofe que se avecina, que ya está a las puertas, vendrá en el Katún-13
  D. ¿En el año 2043?
  M. Sí, por ahí entre el 2040 y el 2043 comienza el Katún-13. Estamos en el Katún-12; todavía
  no hemos llegado al 13. En el Katún-13 viene el máximo de acercamiento de Hercólubus. Es claro
  que al acercarse Hercólubus en una forma exagerada hacia nuestro planeta, pues tiene que producir
  catástrofes porque es un planeta muy grande, muchos miles, casi millones de veces más grande
  que la Tierra. Es un “monstruo”, que al acercarse al paso que se va a acercar, tan exageradamente, a
  nuestra órbita terrestre, pues, no resiste el planeta Tierra; “lo volteará al revés”, completamente.
  Pero antes de que suceda la catástrofe, de “voltearlo al revés”, con su poder magnético halará
  el fuego líquido que está en el interior de la Tierra. Ese fuego líquido, al saltar a la superficie, se
  riega por toda la costra terrestre y la quema totalmente; no hay nada que pueda quedar sin quemarse;
  todo lo quema.
  De manera que, al quemarse todo, pues, perecerá toda la humanidad. Ese será el día del
  “Gran Incendio Universal” profetizado por Miguel de Nostradamus; profetizado por Pedro el apóstol
  cuando dijo: “Los elementos, ardiendo, serán deshechos, y la Tierra y todas las obras que en ella
  hay serán quemadas”; profetizado por Jesús de Nazareth en su sermón profético; profetizado por
  los mayas en su Katún-13; profetizado por los nahuas cuando hablan de que “los Hijos del Quinto
  Sol perecerán por el fuego y los terremotos”; es decir, está profetizado y requeteprofetizado por
  todos; hay mucha documentación sobre esto. Que se quemará la costra terrestre totalmente, que no
  quedará nada vivo.
  Ahora, en el máximo de acercamiento de Hercólubus se produce una revolución de los ejes
  de la Tierra. Hay, pues, un movimiento completo: lo que hoy son Polos, se convertirá en Ecuador, y
  lo que hoy es Ecuador se convertirá en Polos. La Tierra dará una voltereta; será algo terrible...
  Decía por ahí un extraterrestre que si se llegara a hacer explotar a Hercólubus (ellos tienen
  los métodos y podrían hacerlo), la catástrofe sería tan terrible que destruiría todo este Sistema
  Solar. Vean ustedes cómo es de grande Hercólubus.
  D. ¿El acercamiento de Hercólubus afectará también a otros planetas?
  M. Pues, eso dicen los astrónomos. Nosotros tenemos, en nuestra institución, un mapa trazado
  por los mismísimos astrónomos; de manera que no estamos inventando nada de nuestra cosecha.
  Eso está ya debidamente estudiado por todos los observatorios de Londres, de París, de Manila
  y de todas partes. Ahí tenemos el mapa que los astrónomos han trazado; no lo hemos trazado
  nosotros. Podría decirse: “Bueno, ustedes por su fanatismo lo trazaron”, pero no, no hemos trazado
  eso; son los astrónomos oficiales quienes lo trazaron. Según ese mapa, Hercólubus afecta directamente
  a la Tierra y secundariamente influye sobre Júpiter, Marte y Urano. Eso secundariamente,
  porque afecta fundamentalmente a la Tierra.
  D. ¿Por qué, específicamente, ha de suceder eso en nuestro Sistema?
  M. Es el juego mecánico de las esferas; este es un juego que existe desde la aurora de la
  creación. Nuestro Sistema Solar tiene que viajar alrededor del Cinturón Zodiacal y cada vez que
  termina un viaje del Sistema Solar alrededor del zodíaco, coincide el final de ese viaje con la órbita
  de Hercólubus. Así que, es una cuestión mecánica.
  D. ¿Está sincronizado todo eso?
  M. Sí, sincronizado. De manera que, entonces, Hercólubus tiene su órbita alrededor del Sol
  Tylar y viene a coincidir, al final del viaje, con nuestra Tierra y todo nuestro Sistema Solar. De
  manera que, Hercólubus coopera con esto, marcando el fin del Año Sideral.
  D. Si todo será quemado sobre la costra terrestre, ¿cómo o de qué manera va a florecer de nuevo
  la humanidad, los animales, las plantas y todo lo demás?
  M. Pues, habrá algunos lugares que no serán afectados. Es posible, por ejemplo, que muchas
  puntas, muchos cerros elevados queden convertidos en islas; que no reciban daños muchos cerros
  altos, como por ejemplo montañas como el Everest. Hoy en día el Everest tiene 8.800 metros sobre
  el nivel del mar y vendría a ser una isla maravillosa. Puedo asegurar que el Everest se va a convertir
  en una isla, y si algunos fueran avispados podrían subirse al Everest para que no les pase nada, pero
  se morirían de hambre los pobres; mientras tanto, se morirían entre la nieve y el hielo. Bueno, y
  habrá así muchos lugares de montañas elevadas que se convertirán en islas.
  También habrá que tener en cuenta que el núcleo que se va a formar estará integrado por el
  Ejército de Salvación Mundial. Ese núcleo, obviamente, tendrá que marchar hacia un nuevo éxodo.
  Antes de la catástrofe, serán sacados secretamente; serán llevados, conducidos hacia una isla en el
  Pacífico donde no va a suceder nada. Es una isla bastante amplia, donde se podrá tener agricultura,
  donde se podrá tener ganado, donde se podrán tener caballos, donde se podrán cuidar muchas
  especies para que no desaparezcan. El grupo selecto marchará hacia esa isla del Pacífico...
  D. Maestro, se me ocurre pensar ahora cuál será el destino de nuestra Luna, después de la
  catástrofe que se avecina...
  M. Bueno, yo no he investigado cuál va a ser la suerte de esta Luna que nos ilumina. Siempre
  he pensado que va a caer sobre la Tierra; siempre he pensado eso, porque la Tierra, poco a poco, a
  través de los siglos, la ha ido atrayendo. Con ese evento es posible que se provoque la caída de la
  Luna en la Tierra; esa es una posibilidad. Ahora, en caso de que eso no sucediese, sería más tarde la
  caída de la Luna en la Tierra.
  Pero bueno, en todo caso, lo que sí puedo decirles y garantizarles, es que la catástrofe es
  inevitable. Nosotros estamos formando el Ejército de Salvación Mundial con gentes de todas las
  nacionalidades, pueblos y lenguas.
  Pero, ¿qué es lo que buscamos? Buscamos formar el núcleo que ha de servir de base para la
  futura Sexta Raza Raíz; eso es lo que estamos haciendo. Queremos ese núcleo. El Movimiento ha crecido; está establecido en todo el hemisferio Occidental; millones de personas ya
  pertenecen al Movimiento; son gentes de la Gnosis. El Movimiento crecerá pronto por
  Europa y el Asia; en el Asia llegará a su máximo apogeo.
  Pero entre todos esos millones de personas que ingresen a la Gnosis, solamente se seleccionará
  el personal que haya trabajado sobre sí mismo, que haya disuelto el Ego o por lo menos parte del
  Ego, para podérseles conducir hacia la isla donde hay que conducirles. Pero personas con Ego,
  personas que no hayan trabajado sobre sí mismas, que no hayan sido capaces de disolver el Ego, no
  son personas en las que nosotros podamos confiar; esa clase de gentes perecerán por el fuego y el
  agua. Se podrá tener confianza, realmente, en los que trabajen sobre sí mismos; serán esas las
  gentes en las que se podrá tener alguna confianza. ¡Esa es la cruda realidad de los hechos!
  En esa isla, los sobrevivientes aguardarán por algunos siglos en medio del vapor de agua,
  porque por aquellos días la Tierra estará envuelta en fuego y vapor de agua. Allí aguardarán a que
  del fondo de los océanos surjan tierras nuevas, surja el escenario de la Sexta Raza Raíz, porque con
  la revolución de los ejes de la Tierra, los mares actuales se desplazarán; y los continentes actuales
  quedarán bajo el fondo del mar. Entonces habrá que aguardar a que surjan, del fondo de los mares,
  tierras nuevas y cielos nuevos (como dijera también Pablo de Tarso, y eso es verdad), donde vivirá
  la Sexta Raza Raíz.
  Ahora, para ir a vivir ya en esas tierras nuevas que van a surgir del fondo de los mares,
  solamente será posible para quienes definitivamente hayan desintegrado el Ego. Si alguien, por
  muy inteligente que sea, no ha desintegrado la totalidad del Ego, en un ciento por ciento, no se le
  dará cuerpo en la Edad de Oro, porque en la Edad de Oro no se le dará cuerpo físico a nadie que no
  haya reconquistado la inocencia en la mente y el corazón. Si hay alguna persona que no sea inocente,
  que todavía no la ha conseguido, esa persona no tendrá cuerpo en la Edad de Oro. La Edad de
  Oro es para gentes puras, inocentes. ¡Esa es la cruda realidad!
  D. Cuando surja ese nuevo escenario, ¿qué sucederá con los círculos sumergidos de los mundos
  infiernos? ¿Se limpiarán o continuarán como están?
  M. Los nueve círculos dantescos, el “Tártarus”, el “Reino de Plutón”, continuará exactamente.
  Claro que todos estos millones de personas que actualmente viven sobre la faz de la Tierra,
  ingresarán en la involución sumergida de los mundos infiernos; involucionarán en el tiempo, y a
  través de un largo período de años irán desintegrando el Ego.
  De manera que, cuando una persona en los mundos infiernos desintegra el Ego, es decir,
  cuando pasa por la “muerte segunda”, que es la muerte del Ego, entonces la Esencia sale a la luz del
  Sol, resurge pura e inocente a la luz del Sol para evolucionar en los reinos mineral, vegetal y
  animal, hasta reconquistar el estado humano que otrora se perdiera.
  Todos estos millones de seres humanos que pueblan la faz de la Tierra, ingresarán en los
  mundos infiernos, involucionarán en el tiempo, y con la “muerte segunda” se escaparán del averno
  para reiniciar nuevos procesos evolutivos que habrán de partir del mineral, continuar en el vegetal
  y proseguir en el animal hasta llegar al estado humano que otrora se perdiera. Al llegar al estado
  humano, todas esas Esencias, retornadas en humanos cuerpos, formarán los pueblos de la Edad de
  Oro, que será una humanidad inocente y pura. De manera que, en la Edad de Oro, la humanidad
  volverá a salir de las manos de su Creador, completamente inocente y totalmente pura.
  D. Cuando la futura Sexta Raza llegue a su Edad de Hierro, ¿se volverá a degenerar?
  M. Bueno, eso sí, eso sí es normal... Vemos que la Tierra gira alrededor del Sol y tiene sus
  cuatro estaciones: Primavera, Verano, Otoño e Invierno. Así también sucede con el Año Sideral, en
  el viaje del Sistema Solar alrededor del Cinturón Zodiacal; tiene sus cuatro estaciones: (Primavera,
  la Edad de Oro; Verano, la Edad de Plata; Otoño, la Edad de Cobre; Invierno, la Edad de Hierro).
  Cuando vuelva la Edad de Hierro, volverá otra vez una humanidad perversa como ahora. Pero, por
  ahora, vuelven las Edades de Oro y de Plata (después de la gran catástrofe, eso es obvio); vendrán
  muchísimos siglos, miles de años de belleza, con una naturaleza virgen surgida del caos, surgida del
  fondo de los mares. Será bellísimo todo...

Hagamos una fieshta! y lo digo así porque tengo aparato JUEJJ