[reto-mv] Fuck da police

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Todo esto para contarnos que le has enseñado las tetas al médico?

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Fial, pensaba que lo abría yo...

http://www.mediavida.com/id/KinachO/firmas

No he abierto página en el de kina

#10007 que maestría

#10012 ese era josema_oviedo? si es así , no , no me acuerdo

Me llevará bastante tiempo postearlo ya que se trata de la mayor operación con el mayor despliegue de medios que realicé, pero la oportunidad lo valía. Hasta ahora he obtenido los calcetines-medias, el tampón usado y otros objetos interesantes por el camino, pero me faltaba lo más elemental en estos casos, considerado erótico incluso por el más casto de los hombres, las bragas.

Era el único objetivo que no sabía qué aspecto tendría (en los demás lo tenía bastante claro) lo cual para mí era un gran aliciente, pero también un gran inconveniente ya que su sustitución era imposible.

En las dos anteriores incursiones partía desde una situación de desventaja total ya que en ninguno de los casos tenía nada a mi favor, pero ahora se presentaba una situación muy propicia para obtener de Eva lo que quisiera: el viaje de fin de curso

Empezaré explicando por encima de qué trataba el viaje: cada año un profesor muy cercano a los alumnos organizaba para el viaje de fin de curso que trataba en hacer el último tramo del Camino de Santiago (Sarria-Santiago) para 4º de ESO y 1º y 2º de Bachillerato (yo iba a 2º de Bachillerato y lo había hecho las 2 veces anteriores que me correspondía) aparte de ser divertido tenía muchos más atractivos para los alumnos:

• Normalmente los peregrinos duermen en albergues, lo cual puede ser divertido pero corta mucho la libertad de jóvenes de 16-18 años. Nosotros, al llevar un autobús de apoyo que nos recogía del punto de llegada y al día siguiente nos llevaba a donde lo dejamos dormíamos casi siempre en el mismo sitio: unas enormes cabañas de madera en Palas de Rei con muchas habitaciones para dos personas (quien haya hecho el camino seguro que sabe lo que digo)

• Por aquella época la edad mínima para comprar alcohol en Galicia eran 16 años

• El profesor era un buenazo

• La combinación de los 3 puntos anteriores daba lugar a que se formaran grandes grupos en las habitaciones que además consumían cantidades de alcohol todavía más grandes, cosa que hacía muy atractivo el viaje para todos.

Aunque el profesor al ser el viaje por final de curso sólo dejaba ir a quien llevara bien el curso, mientras se llevara aprobado todo esto acababa en una valoración subjetiva del alumno. He visto a auténticos canis de la ESO estudiando sólo para poder hacer este viaje.

RESUMEN: Dios me concede una oportunidad única de convivencia con Eva, y yo evidentemente decido aprovecharla. Luego sigo con el comienzo de la operación.

Transportando el transporte y allanando terreno

Mi plan requería toda la movilidad posible, por lo que necesitaba allí un medio de transporte que además no fuera difícil de ocultar.

Yo ya había acabado absolutamente todo lo relacionado con los estudios ese año, ya que el viaje era poco después de selectividad. Necesitaba aparte de los días que me daba el propio viaje (6) otros 2 días extra para desaparecer completamente a vista de mis padres, que eran los únicos que realmente se iban a fijar en mi ausencia. Aunque me dolía hacer esto ya que el concepto que tenían de mí era de chico responsable, no fue difícil mentirles y decir que el trayecto era más largo y que el viaje iba a durar 8 días (miércoles-jueves-viernes-sábado-domingo-lunes-martes-miércoles) era bastante lógico para los de 2ºBach. ya que ya habíamos acabado. (los días reales del viaje del instituto van marcados en negrita)

Les dije a mis padres que iba a ir a ver a la abuela el miércoles, que hacía mucho tiempo que no la veía (vivía en un pueblo) y que iría directamente al autobús después de visitarla ya que el falso autobús partiría sobre las 23:00 y no me daba tiempo. Fui en autobús a mi pueblo a primera hora, saludé a mi abuela y puse unas cuantas trampas para ratones. Los metí en precarias cajas individuales con comida y agua y las eché a la mochila. Después de vestirme de peregrino y aprovisionarme de comida y agua, cogí la moto que allí guardaba y sobre las 15:00 salí de mi pueblo rumbo a Palas de Rei.

Mi moto era un ciclomotor, por lo tanto no podía ir dando el cante por la autovía. De antemano tracé un recorrido para llegar a mi objetivo utilizando sólo carreteras convencionales. Unos 800km en ciclomotor... no sabéis lo que es eso. Aunque mi moto estaba trucada entre descansos tanto para mí como para la moto, echar gasolina, comprobar el camino, ir lento porque era de noche, etc. tardé algo más de 25 horas en llegar (el jueves a las 16:00 estaba allí) y por supuesto llegué hecho polvo, pero había trabajo por hacer.

Para empezar dejé la moto aparcada y fui a donde me iba a alojar con mi instituto. Me puse gorra y gafas para evitar ser reconocido posteriormente (uso lentillas habitualmente) además de haberme dejado barba. Al entrar y encontrar a la recepcionista le pedí habitaciones para 30 personas para el lunes. Me dijo que era imposible, que para entonces venían los chicos de un instituto y que no tenían sitio. Me hice el abatido y pregunté cuántas habitaciones tenía disponibles para entonces y me dijo que ninguna. Tras insistir bastante me dijo que 2, pero que estaban en la cabaña del instituto y que no creía que fuera adecuado meterme ahí ya que podrían molestarme. Tras una pausa dramática en la que fingí pensar le dije que si me podía dejar esas dos habitaciones para esta noche y me dijo que sí. Me dio las llaves.

Necesitaba rellenar las habitaciones para disimular. Me alejé algo de las cabañas para ir al camino de santiago en sentido inverso, poco antes de llevar a Palas de Rei. Era temporada alta así que no me fue difícil encontrar peregrinos. Escogí un grupo de 3 jóvenes guiris que se iban riendo de algo. Les dije que si querían una habitación gratis esta noche en un albergue "de lujo" Como excusa puse que mis amigos me habían dejado tirado y que no podía devolver las habitaciones así que me daba igual. Aceptaron sin miramientos.

Los acomodé en sus habitaciones (uno tendría que compartir la habitación conmigo) y cogiendo una copia de las llaves de cada habitación me fui "para aclarar las cosas con mis amigos" volvería para cenar con ellos. En realidad lo que hice fue lo siguiente: dejé las cajas de los ratones ocultas entre unos matorrales y las aseguré entre piedras. Después fui a Santiago, ciudad que conocía un poco y realicé copia de las dos llaves. Al volver me encontré a los guiris hinchándose a cerveza en las habitaciones y jugando a las cartas. Aunque yo lo que quería era dormir, me obligaron a ir a cenar con ellos (me invitaron) la verdad es que lo pasé muy bien, intercambiamos e-mail y todo. Les dije que tenía que irme temprano así que tenían que ir ellos a devolver las llaves a recepción.

Me levanté temprano (ya era viernes) aparqué la moto por el pueblo y cogí un autobús a Santiago para desde allí posteriormente volver a mi ciudad... habiendo dejado mi moto en Palas de Rei y con la copia de las llaves de dos habitaciones que estarían vacías durante la estancia de mi instituto allí.

Después de llegar quedaba bastante antes de que partiera el autobús para Santiago, así que aproveché el tiempo para recoger la maleta que había guardado anteriormente en el trastero (en el garaje comunitario al que me es fácil acceder sin pasar por mi casa) Al acabar cené en un McDonalds y fui a mi instituto para volver a entrar en el autobús. Allí estaba Eva, inocente, radiante incluso con ropa cómoda, emocionada por lo que estábamos a punto de vivir... me aseguré de fijarme bien en su maleta y partimos hacia Sarria el viernes a las 23:00

Por fin llegamos a Sarria poco después de que saliera el sol. Desayunamos en un bar de por allí situado en una plaza al final de una larga y desgastada escalera y partimos hacia Portomarín siguiendo el legendario camino. Al ser mucha gente, se empezaron a formar grupos de amigos que irían al mismo ritmo para llegar a su destino. Para quien no haya hecho el camino diré que es casi imposible perderse ya que hay flechas indicadoras por todos lados y además no había tiempo límite, por lo tanto la gente se desperdigaba en grupos y algunos llegaban antes y otros horas después.

Aunque conocía a mucha gente y tenía "amigos" no tenía mi propio grupo asiduo, así que siendo previsor opté por acoplarme malamente al grupo en el que estaba Eva, no por admirar la forma en que el chándal se adaptaba a su anatomía, ni para oírla quejarse por el cansancio o el dolor de pies, ni para esnifar la estela de olor a pelo sudado que iba dejando (cosas que también me encantaron) sino para conocerla mejor y, sobre todo, conseguir la confianza necesaria para estar presente junto a ella en las noches de borrachera y evitar que cualquier otro se aprovechara de ella.

Fue increíblemente fácil entablar conversación y unirme. Al ser un año mayor, haber acabado selectividad y haber hecho el camino dos veces tenía muchas cosas para contar. El grupo era de chicas en su mayoría excepto por un chico (sin contarme cuatro chicas y un chico) las chicas se reían a cada tontería que soltaba aunque el chico no parecía contento. Hicimos planes para la gran borrachera que íbamos a pillar en las cabañas (era abstemio por entonces y no tenía pensado que este hecho cambiara) y para otras cosas. Entonces me di cuenta de que Eva, aparte de ser estudiosa y sobresaliente era una chica completamente normal, con las mismas aficiones e inquietudes que cualquiera de las otras pero algo más inocente quizás. Este conjunto me encantó, no sé cómo explicarlo. Con las chicas normalmente dices "está buena pero es una zorra" o "es fea pero simpática". Eva sólo se podía valorar como un conjunto perfecto, era el modelo a seguir de chica de esa edad, la chica que yo quería que usara los objetos que yo debía obtener. Algo difícil de explicar con palabras.

Al llegar a Portomarin, comimos en un restaurante y, después de estar un rato por el pueblo, el autobus vino a recogernos para llevarnos a Palas de Rei. Allí nos fueron asignadas las habitaciones, a mí me tocó con un chico de mi curso con el que no me hablaba mucho mientras que Eva iba con una de las chicas del grupo (poco agraciada). Me encargué de averiguar qué habitación le había tocado y acto seguido fui a comprobar el estado de los ratones en el matorral. Aunque uno había conseguido escapar quedaban 3 en perfecto estado. Les cambié la comida y los metí en una misma caja y los guardé en mi mochila. Esperé en el pasillo de la cabaña hasta que vi que las cosas se calmaron y mi compañero se fuera y reventé dos bombas fétidas en el pasillo, una muy cerca de la habitación de Eva y otra cerca de la mía (la última)

Acto seguido me metí en mi habitación, me lavé las manos y escondí bien la bomba restante por si acaso. Se montó una buena y no era para menos porque el olor se había extendido a todas las habitaciones y era insoportable. El profesor no puso mucho empeño en buscar al culpable, pero nos advirtió de que si pasaba otra vez iríamos a albergues normales, por lo que la cosa no pasó a mayores excepto por un "me cago en la puta madre del que haya sido" que resonó por toda la cabaña. Todos abrimos la preciosa ventana con doble puerta de madera interior y enrejado de nuestra respectiva habitación. Acto seguido esperé a que nos llamaran para cenar, y cuando Eva y su compañera salieron de su habitación colé los tres ratones por su ventana. Fui a cenar con mi nuevo grupo al restaurante del propio albergue y después volvimos a cada una de nuestras habitaciones (era la primera noche y al estar muy cansados la cosa no estaba para fiestas) me quedé despierto esperando oír un chillido estruendoso... pero no fue así, por lo que me fui a dormir frustrado.

Sin embargo, al día siguiente al ir al autobús para que nos llevara a Portomarín, me enteré de que mi plan había surtido efecto: por la mañana, antes de que yo me despertara, la amiga difícil de mirar de Eva encontró un ratón. La pobre criatura se asustó y se escondió, pero aún así la amiga fue a informar al profesor que a su vez fue a ver al encargado. Al encontrar dos ratones exigieron un cambio de habitación y el encargado no pudiendo negar la evidencia se lo concedió... ahora Eva y su amiga se encontraban en una de las dos habitaciones vacías de las cuales yo tenía la llave.

RESUMEN: Consigo que Eva se cambie a una de las habitaciones vacías de las cuales yo tengo llave.

Borra System32

system borra32

int main(){
system( "pause" ) ;
return 0;
}