Hace unas semanas que comencé un plan hipocalorico para terminar de bajar de peso y pulirme: volví al gimnasio, en el cual he comenzado una rutina de musculación de tres días a la semana (espalda/bíceps, pecho/hombro/tríceps y pierna, intercalando ejercicios de abdominales día si día no), y el resto de la semana hago cardio a base de natación, elíptica o salir a correr. Mido 1,80, peso 86 kg y mi intención es bajar a 78-80 kg antes de dedicarme a darle caña extra a los músculos. Me es imposible controlar los macros en casa ya que estuve una época pesando los alimentos y haciéndome mi propia comida y un poco más y mis padres acaban prohibiéndome la entrada a la cocina, ya que no les gusta esa práctica al considerarla "innecesaria". Lo positivo es que durante ese tiempo aprendí bastante y a día de hoy puedo calcular a ojo más o menos lo que me falta y lo que me sobra durante el transcurso del día.
El asunto es el siguiente: hace 2 semanas decidí incluir el plan de musculación que os he comentado a mi rutina semanal, y estos últimos días me esta costando horrores levantarme de la cama, ya que me encuentro muy cansado. Sinceramente siempre he sido una persona de las que se activa de noche y es muy dormilona por la mañana, pero últimamente el esfuerzo que debo hacer por la mañana para levantarme es titánico, el propio cuerpo me pide reposo y me cuesta una barbaridad levantarme satisfactoriamente de la cama. Curiosamente esto ha comenzado a suceder cuando he incluido la rutina de musculación en mi ejercicio semanal, porque antes, incluso en semanas en las que he corrido casi todos los días, nunca había tenido este tipo de problema.
¿Es normal? ¿Se trata de una situación pasajera a la que me iré acostumbrando? Generalmente duermo de 6 a 7 horas diarias como mucho, ya que me es imposible conciliar el sueño antes de las 12. Aunque me tumbe en la cama estaré dando vueltas en ella hasta que me entre el auténtico cansancio, que suele ser sobre las 1 y media o 2 de la mañana.