Trucos para motivarse a ir al gimnasio

¿Quieres ir al gimnasio pero no tengo el tiempo, o falta la voluntad por alguna razón? Puedes empezar por decir la verdad a ti mismo: no voy al gimnasio porque no quiero. Cualquier persona adulta que ha hecho el compromiso por si misma para ir al gimnasio al final resulta no tener ninguna motivación. Esto generalmente resulta de un problema que se soluciona fácilmente: la pereza. La buena noticia es que lo que se necesita es el primer mes. Tan pronto como el gimnasio es parte de tu rutina diaria no te costará nada para hacer ejercicio físico.

Muchas personas deciden ir al gimnasio porque es una manera de hacer un entrenamiento completo y supervisión por un profesional.

Trucos para ganar motivación para ir al gimnasio
Si quieres motivarse a ir al gimnasio hay pequeños trucos que funcionan como estimulantes para contrarrestar tu falta de voluntad. Pero nada de esto funciona si no tienes ningún deseo de ver los resultados aparecer. Si no haces un compromiso real con tu cuerpo producirás apenas algo de resultados.

Estos trucos trabajaren para varias ocasiones, y puede trabajar contigo. Recomiendo que lo tomes en serio para un resultado máximo.

Truco del papel

La primera motivación para no faltar al gimnasio es imprimir un documento con la matrícula del gimnasio (Precio $) en letras muy grandes. Imprime 4 hojas y colocados en lugares estratégicos:

En la parte superior del espejo, para estar obligado y revisar diariamente.
En el refrigerador para recordarte cada mañana.
En la mesita de noche para cuando apagues la alarma.
En el coche (a menudo entra en el coche y te vas a pasear en el parque en vez de ir al gimnasio).

Muchas personas se sorprenderán de la existencia de esos papeles, pero cuando le expliques la razón le gustará la idea. Una buena motivación para ir al gimnasio!

Recompensa y truco del pensamiento positivo

Llegado a un punto cuando comiences a darte cuenta de los puntos negativos de ir al gimnasio:

Tenías que ver media docena de personas con cuerpos fabulosos y que siguen luchando para tener mejor cuerpos.
Tienes que aguantar una hora en un espacio cerrado, sudoración y caliente

Estos pensamientos te invaden diariamente, unos diez minutos antes de que te tengas que ir al gimnasio. Termina haciendo algo muy simple que te traerá resultados, el truco de recompensa y pensamiento positivo. Estos son algunos ejemplos:

Empieza a hacer 20 minutos de jacuzzi: si te dedicas a práctica entonces podrías ir al baño turco, caso contrario o no.
Si te propone al gimnasio todos los días podían hacer dos masajes por mes, de lo contrario no podrías.
Empieza a socializar con personas y cada día pregunta si estas cumpliendo los objetivos y quién está en el camino correcto y si se mantiene motivada.

Estos son algunos ejemplos que he encontrado y puesto en práctica, pero hay muchas otras recompensas que hacen más sentido para ti y menos sentido para mí. Es una cuestión de ser creativo.

El horario para entrenar

Haz una cita con un entrenador o con un colega tuyo en el gimnasio. De esa forma tu subconsciente casi te obligará a asistir, aunque va en contra de tu voluntad. Te sentirás más motivado para ir al gimnasio, incluso si ese fuera el plan menos atractivo para tu día.

Consejos: no mantengas el número telefónico de tu entrenador, ya que te sentirás tentado a enviar un mensaje a cancelar tu cita.

Buscar nuevas clases

Si eres infeliz con ir al gimnasio sólo, como dicen los amigos, prueba nuevas clases:

Clases de artes marciales (son excelente resistencia y entrenamiento de resistencia)
Pilates
Gimnasia
Aquaerobic
Entre otros…

Se trata de ser creativo y encontrar formas para motivarte para ir al gimnasio. No es difícil, sólo compromete a tu cuerpo y deja de dar excusas.

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