Intel ha anunciado novedades sobre sus procesadores, concretamente la migración a los 32nm para finales de este año o principios del 2010.
Esta evolución de los actuales Core i7 (45nm) llegará bajo el nombre Westmere. Esta plataforma abarcará toda la gama de productos, derivando en varias plataformas: portátiles, equipos de sobremesa y servidores.
Para portátiles nacerá la plataforma Calpella que se dará a conocer como Centrino 3. La primera versión, denominada Clarksfield, seguirá siendo en 45nm y dispondrán de cuatro núcleos que emularían ocho. La segunda versión a 32nm y de nombre Arrandale constaría de 2 núcleos que emularían cuatro. La principal novedad de esta plataforma destinada a portátiles es la implementación de CPU y GPU en un mismo chip en los modelos de 32nm. Esta nueva tecnología también está en proceso por parte de la competencia AMD bajo el nombre Fusion.
Para equipos de sobremesa, la plataforma elegida será la plataforma Piketon. Al igual que en portátiles, aparecerá dos versiones: la Lynnfield en 45nm y cuatro núcleos, y la Clarkdale en 32nm y dos núcleos. Estos procesadores completarán la gama media de Intel. La gama alta que sustituirá a los actuales Core i7 estará compuesta por los Gulftown, fabricados en 32nm, seis núcleos que emularán 12 hilos de ejecución y funcionarán bajo el chipset X58. Esta gama no la veremos hasta el 2010.
Por último, para servidores las plataformas elegidas serán las Boxboro-EX, Tylersburg-EP y Foxhollow, cada una enfocada a un tipo de servidor diferente y estrenarán una nueva arquitectura de nombre en clave Sandy Bridge.