En lugar de hacer un FPS estilo retro como tantos otros en los últimos años, el estudio KillPixel usará el motor del primer Quake para lanzar un homenaje a los FPS de los 90.
Wrath: Aeon of Ruin es un FPS de fantasía oscura con mucho aroma a HeXen y con un un sistema de hubs que fomenta la exploración permitiendo jugarlo de manera no lineal.
Saldrá en verano para Windows, Mac, Linux. Ya en 2020 llegará también a Nintendo Switch, PS4 y Xbox One.