Con Touhou Luna Nights, seguimos incrementando el cada vez más extenso catálogo de Metroidvanias que tratando de simular los viejos tiempos, logran dejar su sea de identidad propia gracias a las nuevas mecánicas y añadidos que sus desarrolladores les dan en la actualidad. El título que nos ocupa de Vaka Game Magazine, Team Ladybug no iba a ser menos y de hecho, desde ya os digo que en su jugabilidad es de lo mejorcito que hay en el género ahora mismo.
El juego es un metroidvania al uso, pero una gran diferencia que guarda con respecto a muchos otros, y es que aquí nos vamos a encontrar un gameplay más frenético de lo habitual. Nuestra protagonista, Sakuya, capaz de lanzar cuchillos y ralentizar el tiempo, es muy rápida y grácil a la hora de combatir, lo cual hace que la jugabilidad sea muy satisfactoria.
Nuestro ataque básico, el lanzamiento de cuchillos, no es ilimitado, ya que consumen energía (o maná para que nos entendamos), sin embargo el juego te incita a arriesgarte a ser golpeado, puesto que si pasamos cerca de los enemigos o de sus ataques, absorberemos energía con la que recuperar nuestra barra para seguir lanzando cuchillos. Puede sonar un poco extraño al leerlo, pero una vez estamos jugando seremos plenamente consciente de esta mecánica y lo bien implementada que está.
Otro de los puntos más destacables y únicos que posee este videojuego es la habilidad de Sakuya para ralentizar o incluso parar por completo el tiempo. Esto desde luego es lo mejor del título, ya que se integra con el gameplay a la perfección, no solo para combatir, sino también para superar muchas plataformas o incluso pequeños puzzles. Esta habilidad (que dispone de dos botones, uno para ralentizar el tiempo y otro para pararlo) se puede usar sin ningún coste, más allá de un pequeño enfriamiento que tiene, y nos va a deparar los mejores momentos del juego. Teniendo siempre que usarla con cabeza para aprovechar puntos débiles de los jefes finales, esquivar ataques mortales, superar ciertas tramas del escenario o conseguir sortear alguna parte del escenario que a tiempo real sería imposible.
Como buen metroidvania, también nos espera una buena cantidad de salas interconectadas que explorar, aunque aquí, como ya dije al principio, es un juego que está más enfocado a la acción que a la exploración, por lo que las salas no guardan apenas secretos que encontrar ni hay demasiado backtracking, salvo algunas puertas de colores cerradas que deberemos volver al conseguir la llave. Pese a esto, no penséis que también se han sacrificado las típicas habilidades que en otros juegos se obtienen al avanzar (como el doble salto etc), aquí también están presentes y cumplen su función de permitirnos acceder a algunos lugares que antes no podíamos, pero sobre todo son útiles para combatir y tener un mayor repertorio de movimientos, así como de armas aparte de los cuchillos.
Ya que hay bastantes enemigos distintos, así como un puñado de jefes finales que resultan desafiantes y que nos obligarán a aprendernos sus mecánicas y saber usar las nuestras en su contra. Muy entretenidos y satisfactorios, sin duda.
Gráficamente es perfecto para lo que pretende ofrecer, así como la BSO, muy cañera y que casa a la perfección con el juego, un control exquisito y super divertido de jugar. Sin embargo, su mayor punto débil es la duración. En apenas 4 horas podremos habérnoslo acabado y uno se pregunta ¿por qué? ¿por qué no dura 15 horas más? Es una lástima que teniendo tantísimas bondades, el juego apenas dure un suspiro, porque desde luego podríamos estar ante uno de los grandes metroidvania de los últimos tiempos, quizás no a la altura de Hollow Knight (lo de Team Cherry es casi insuperable), pero sí muy por encima de la media y tocando el sobresaliente. Algunos escenarios tampoco están demasiado inspirados, al igual que ciertos enemigos básicos.
Valoración
Touhou Luna Nights es una pequeña joya y quiero hacer énfasis en lo de pequeña, porque es que dura un pestañeo. En apenas 4 horas lo puedes terminar y es de esos juegos tan buenos que, por culpa de una duración tan escasa, te deja con un sabor bastante agridulce. Duele su corta duración. Por lo demás, es original, muy divertido, y apenas tiene nada que envidiar a los grandes del género (salvo la duración de otros, eso sí). Merece muchísimo la pena y más aún si te gusta el género, en ese caso es imprescindible.
#HG en MV.