RPV: adiós al YA anticuado formato físico para la nueva consola. Decid hola al modelo Steam.
El lanzamiento de la Xbox One fue un despropósito. Microsoft cometió diversos errores de comunicación y definición del producto que hicieron que la PS4 cogiera una ventaja en ventas que podría haberse evitado por completo. Eso es lo que ha admitido Robbie Bach, que fue máximo responsable de la división Xbox y que además de confesar esos errores también habló sobre cómo han aprendido para el futuro.
Aunque Bach dejó Microsoft en 2010, sus comentarios dejan claro que decisiones como la inclusión obligatoria de Kinect, el protagonismo de su papel multimedia, la hipotética conexión a internet 24 horas o la confusión sobre el tema del DRM y los juegos de segunda mano hicieron mucho daño a ese lanzamiento, pero este directivo afirma que la empresa ha aprendido de sus errores y que es muy probable que las cosas cambien mucho en la futura consola, que abandonará los formatos físicos para adoptar el modelo de descargas digitales.
La futura Xbox replicará el modelo de Steam
No es probable que en esa futura nueva iteración de la consola de Microsoft tengamos DVDs o Blu-rays (o el formato físico que domine el mercado en ese momento) para los juegos, algo que se planteó para la Xbox One pero que se descartó ante las críticas de los usuarios y la industria. Ese modelo planteaba muchas ventajas interesantes y teóricamente compartiría las virtudes de modelos como el popular Steam, pero finalmente todo quedó abandonado para adoptar el modelo conservador basado en los discos que, eso sí, se combinan desde hace tiempo con descargas digitales.
Esa mala comunicación provocó un arranque mucho más fuerte en ventas por parte de la consola de Sony, pero según Bach esto es una carrera de larga distancia: "estas competiciones entre consolas duran 5, 6, 7, 8 años. Creo que la Xbox One ha dejado todo eso [las críticas] en el pasado. Están ganando cuota y volumen... lo increíble es que el mercado de las consolas es más grande de lo que lo ha sido anteriormente".
Lo cierto es que la consola de Microsoft está ganando terreno y en ello han pesado mucho decisiones de los últimos meses como la de no tener que incluir Kinect obligatoriamente -por fin se igualan los precios- o características tan destacadas como las de poder jugar a algunos juegos de la Xbox 360 gracias a un nuevo modo de retrocompatibilidad. La batalla, como dice Bach, no ha hecho más que empezar, y ambos contendientes seguramente nos reserven más sorpresas en el futuro.