Os pongo la primera y segunda parte por si alguno se la quiere leer entera se q ha cachos os puede ir aburriendo pero creerme no dispongo de mas tiempo del q el curro me da XDD la primera parte y segunda estan en letra normal para q veais q es lo nuevo y lo antiguo.
1
La luz era tenue, la habitación se llenaba de oscuridad, casi sin percepción de la bombilla que iluminaba la pequeña estancia. A la vez que me llevaba el cigarrillo a la boca, y mis pulmones comenzaban a llenarse de aquel humo, que todo el mundo seguía considerando perjudicial para el cuerpo humano. Es más, a la mente me venía Ron Peers con su adicción a las dosis catalizadoras. Yo no llegaba a entender como su cuerpo, lleno de cicatrices había conseguido acostumbrarse a tantas dosis. Cualquier otra persona que hubiera tomado mas de cinco en una semana, ahora mismo estaría en eso que el reverendo Job, nos explicaba cada noche antes de cenar, ese otro mundo al cual nuestra alma viaja después del ultimo suspiro, donde en teoría según el reverendo seriamos juzgados por nuestros actos, el cielo.
La mayor parte de la tripulación era atea, aunque aun quedaban bastantes católicos en la nave. Y todos atendían con admiración las palabras de Job cuando leía la Biblia y recitaba ese sermón de supuestos santos y arcángeles. Pero Ron no, él necesitaba una dosis diaria, la verdad es que las dosis y yo no éramos grandes amigos. Aun recuerdo cuando tuve que usar una en la huida de Tanith ante aquel ataque alienígena y desde entonces mi espalda no ha cesado en su dolor. Involuntariamente mi mirada se dirigió hacia el punto centro de mi armadura allí en un pequeño cinturón con un broche de un color verde turquesa, se encontraba mi dosis de defensa, aquellas dosis que eran peores que las drogas, que tomaban los jóvenes en los tugurios para poder resistir horas y horas de una música estridente, eran ahora un arma vital para cada soldado en caso de situación crítica. Sin saber por que empece a pensar en Tanith, tanto tiempo destinado en aquella base, aun recuerdo sus salas de actos y reuniones o nuestro querido gimnasio donde tantas risas echábamos Greg y yo. De pronto una especie de morriña me llegó mientras le daba las ultimas caladas al cigarro que tanto me había costado conseguir. Empecé a pensar en lo sucedido en aquella base la noche que descubrimos la nueva raza alienígena.
Base de Tanith. 6 meses antes.
Greg estaba como siempre fanfarroneando sobre su tatuaje, el famoso tatuaje que se hizo en el planeta de Hera, era cada mañana la misma historia. Los otros soldados ya hacían sus apuestas sobre si esa mañana Greg hablaría de su tatuaje o no, era una locura apostar a que no lo haría, ya que su principal motivación era hablar a los demás de esa marca adosada a su brazo. El dibujo representaba una mujer desnuda que según él había conocido en una cantina del planeta Hera.
Aquella mañana todo estaba muy tranquilo, ni entrenamiento diario, ni reunión de tácticas virtuales, ni oficiales merodeando y vigilando el orden de las taquillas. El perfecto día de descanso, como decía Roy Balance, el mejor mecánico de la división. Quien lo diría de reparar valbulas y propulsores de las naves Falcon, a mecánico oficial del ejercito terráqueo, para el desarrollo de torres centinelas y siegues.
La mañana pintaba aburrida para todos, algunos aun a sabiendas que el juego estaba prohibido dentro de base, sacaron barajas de cartas y empezaron a amenizar la mañana. Otros como Greg no paraban de hacer practicas de tiro con los rifles de asalto pesados. La verdad es que la puntería de Greg era digna de admirar ya que jamás acertaba sobre los blancos de las dianas. Cosa que le daba mucha rabia y lo pagaba con la primera persona que tuviera mas cerca.
Todos estaban por la labor de encontrar algo para la propia distracción, cuando de pronto entró por la puerta trasera del gimnasio el comandante Stieguel. El comandante era una persona arisca de fez soberbia y con un carácter bastante fuerte. Su pelo blanco le quedaba bien con su aire de autoridad, aunque todos sabíamos que Stieguel era digno de su puesto en el ejercito, fue uno de los soldados mas condecorados en las guerras coloniales de Origin.
EL comandante nos miró fijamente y comenzó su discurso.
-Soldados! No estamos aquí para jugar, aunque veo que muchos de ustedes se saltan las leyes a la torera-
-Pero señor, hoy no tenemos nada que hacer…- Interrumpió Roy el mecánico.
-Soldado como se atreve a decir que NO hay nada que hacer!! Usted no escucha las noticias sobre la invasión alienígena en la base de Veil?!-
-Perdone mi intromisión señor, pero todos tenemos la misma idea de los chiflados de Veil, ya sabe son expresidiarios, que con tal de salir de la cárcel se alistaron en el ejercito. ¿Quién nos dice que no se están inventando esta historia para realizar un motín?- dijo Greg.
-Seguro que habrán matado a sus oficiales y ahora quieren que vayamos nosotros, la elite del ejercito para degollarnos mientras nos refiamos- añadió Jeff News.- Jeff era el típico militar, que proviene de familia militar, su padre era militar, su abuelo también, su bisabuelo también etc..- Quizá por esto los oficiales muy pocas veces le llevaban la contraria, aunque el decía que no, nosotros sabíamos rotundamente que altos cargos eran familiares suyos y este era el niño mimado del general.
Aunque Jeff era quien era, Stieguel no le pasaba ni una. Para el comandante jeff era una lacra burocrática que solo estaba allí para pasar informes a su tío el General.
-Pero por el amor hermoso. Quienes son ustedes para criticar lo que han sido otras personas, Se que la rivalidad entre la base de veil y la nuestra es muy grande! Pero la petición de ayuda de esta mañana ha sido muy clara tanto si se trata de una trampa como si no es nada , Iremos- Gritó Stieguel
-Que iremos señor?? Pero si ni siquiera sabemos lo que esta ocurriendo allí ni hemos entrenado hoy- comentó Greg.
2
-Soldado, esa no es excusa- replicó Stieguel.
Cuando los demás soldados se iban incorporando, y acercándose para escuchar la conversación del comandante con los otros soldados, hizo acto de presencia el General Meinor.
Todos los soldados se cuadraron de repente como no lo habían echo con el comandante Stieguel, Meinor era un hombre de estatura pequeña, con un pelo grisáceo con alguna que otra cana blanca, todos los conocían por su gesto. Siempre era el mismo unos ojos bastante abiertos y una cara seria, como la persona que no es capaz de entender el humor de ese chiste que hace reír a todos.
Con voz alta y clara, dijo.
-Soldados, se que no están contentos con las noticias que han dado esta mañana en la RTT, pero los altos cargos ya han dado la orden que vayamos a investigar lo que esta ocurriendo en la base de Veil-
La Rtt era la radio local de Tanith, la única radio en la colonia del planeta ellos mismos se hacían llamar Radio Terráquea Tanith, aunque casi siempre las noticias que daban eran censuradas y de agrado para la población. Nunca daban esa noticia de un soldado desaparecido en los exteriores de la ciudad o ese marido q por injerir dosis catalizadoras había enajenado y asesinado a su familia. NO, los altos políticos no querían que la actual humanidad escuchara este tipo de noticias, ellos solo podían consentir noticias que hablaran de los progresos del ejercito, o las maravillas del nuevo sistema solar conquistado.
Todas estas cosas hacían siempre mella en los soldados que eran los que vivían el día a día y sabían q muchas de las noticias eran completas mentiras, y nunca hablaban de sus compañeros caídos en batalla.
-A las 20:00 de esta tarde los regimientos alfa beta y gamma saldrán acompañados del comandante stheiner y la capitana Janice lust-
Al oír este ultimo nombre, la mitad de los marines empezaron a murmurar,.
-Señor, la capitana Janice hace mas de un año que no sirve con nosotros, además es una mujer, que tiene que hacer ella con nosotros- replicó Jeff
El comandante Meinor se acerco a su sobrino, y apoyando su brazo en el hombro, le dijo.
-Soldado Jeff la capitana Janice es uno de nuestros mejores soldado al igual que una perfecta estratega, dudo mucho que sea usted quien deba decir quien nos acompaña o quien no. Y no le tengo por que contestar, a por que la capitana lleva mas de un año retirada de nuestra base.
Jeff quedo desconcertado, atónito. Nunca su tío le había hablado de tal manera y mas delante de los otros soldados. Sin mediar palabra Jeff abandonó el gimnasio, haciendo caso omiso a Stheiner que le llamaba por su nombre-
- Comandante, espero que esta misión por fin cambie al niño de mi sobrino y lo traiga de vuelta como un hombre, dijo el coronel.
- Y ahora soldados vayan a sus literas equípense con sus respectivas armaduras – Al acabar de decir esto nos miró a Greg y a mi, y entre sus labios se consiguió entender algo q murmuraba-
- Greg espero que su puntería haya mejorado, si no me veré obligado a elegir un nuevo granadero.-
Al oír esto mas enfurecido que nunca el soldado replicó-
-Señor usted deme un lanza granadas y yo haré el trabajo sucio que no puede hacer su sobrino.-
El General, cambio por primera vez su gesto serio por una risa, mas bien una carcajada irónica, y se acerco lentamente hacia el soldado y le dijo.
-Muchacho es para mi un honor que te compares con mi sobrino. Así me demuestras que tienes su misma poca inteligencia. Ahora aparta tu culo de en medio y ves a equiparte, La teniente Demi le equipara con una armadura pesada y un lanzagranadas. Espero que use su armadura bien hijo. Ya que las tenemos contadas.- dijo el general a la vez que se acercaba hacia mi y con su mirada seria de nuevo me dijo:
-Cabo Jhonson, cuanto tiempo hace que no tenemos una de nuestras charlas sobre las antiguas guerras precoloniales.-
Algunos meses anteriores el general se acercaba a mi litera para discutir conmigo los pros y los contras de lo que fueron las guerras precoloniales, yo habia estudiado ese tema como materia optativa en la academia militar. Y el general Mainor era un gran virtuoso del tema.
-Chico,- murmuró suavemente, cómo tenemos el tema de los jet packs,?
-Señor hace mas de 3 meses que no manejo ninguno- le dije en voz alta-
-Te sentirias mas comodo con una armadura pesada?-
-Si señor- le dije yo.
-Muy bien Greg y tu sereis el apoyo principal de la tropa beta, todos vuestros compañeros dependen de vosotros, espero que no les defraudeis- con estas ultimas palabras percibí como su cara cambiaba ese tono serio de nuevo, por uno un poco mas pensativo. Algo que me inducia a pensar que sabia algo más que no queria contarnos.
De repente una mano azotó mi espalda, casi empujandome hacia delante.
-Qué? Chaval, no te vas a poner tu armadura, vamos que la teniente Demi te está esperando, y no me vengas con esos rollos de que entre vosotros no hay algo. –dijo Greg a mis espaldas-
Greg ya estaba vestido con su armadura, aquella ornamenta que se creo a finales de las guerras coloniales del `planeta Eclipse, era espectacular, tenia su propio sistema de ventilacion como refrigeracion, y un conducto para poder reciclar los propios residuos y asi alimentar a su portador durante 10 dias.
El manejo de la armadura era otra cosa mas diferente ya que se movian según los pensamientos, si querias mover una pierna, devías pensar en moverla y lo mismo con todas las demas extremidades. A todos nos llevaba aprender a dominar la armadura unos 2 meses, aunque las viejas leyendas militares decian que Stheiner la domó en una sola semana. Era un alivio que el nos acompañara en esta misión-
Sabía lo que Greg había querido decir con lo de algo entre la teniente y yo. Tiempo atrás la teniente había compartido conmigo algo mas que el trabajo militar. Pero todo aquello quedó en el pasado.
Me acerqué lentamente hacia la sala de armaduras. Alli estaba ella guapa como siempre con un largo pelo rubio que le llegaba hasta la cintura. Ella era la presa perfecta de todos aquellos soldados, que pasaban las noches en el cuartel sin poder ver ninguna mujer por falta de permisos de salida. Aunque bien era savido que la teniente Demi , sabia recordar a todos sus pretendientes el rango que ella ocupaba y que cualquier acto atrevido hacia a ella podia ser una insubordinacion, y pena de carcel.
Greg cada noche no paraba de recordarme que por que no lo volvia a intentar con ella, pero yo tenía mis propios motivos.
-James…. Tu por aquí- dijo ella en un tono muy bajo y sorprendida-
Hacia mas de cuatro meses que no la veia, no me extrañço su reaccion.
-Hola Teniente, me da las llaves para sacar la armadura A-12 de su taquilla- le dije en voz clara y serena-
-Veo que sigues tan frio como siempre respecto a mí,- comento ella – Nunca serás capaz de perdonarme por el amor de dios James fue sin querer!- grito ella casi entre sollozos
A todo esto fue como si un martillo golpease mi cabeza y los trozitos que se habian roto empezaran a mostrar el pasado y a lo que ella se referia, todos los buenos y malos momentos me pasaban ahora por delante de la cabeza. Una de dos podia guardar la compostura y seguir a lo mio o intentar entablar conversacion con aquella bella mujer que trataba de pedir perdon por algo echo en el pasado y que mi mente se negaba a recordar para no volver a caer en el abismo de eso que llaman …amor.
3
Silenciosamente y con paso lento me acerqué hacia la taquilla, ella estaba allí inmobil esperando que yo le diera algun tipo de respuesta. Aunque mi mente ahora ya mas relajada, fria y calculadora solo se dedico a desamarrar la armadura de sus anclajes.
La armadura pesada brillaba al contacto de las luces de la sala. Estaba bastante limpia y pulida, era evidente que esta era una de las armaduras que habian traido en el ultimo viaje de suministros. Las provisiones llegaban una vez cada dos meses ya que la ruta estelar era demasiado amplia y para abastecer a las colonias terraqueas, esto se hubiera aligerado si hubiera mas naves pero con las guerras coloniales, se perdieron muchas de estas naves de transportes.
Demi seguía alli como la estatua en la plaza de una ciudad que ve pasar los años, sin poder comentar nada.
-James de verdad no vas a perdonarme? – Ni siquiera contestarme?- Grito con un tono de voz bastante alto.
El medico de la base el Dr. Flet que estaba en una habitación contigua a la sala se asomó para ver que ocurría. Era por todos sabido que el doctor estaba completamente enamorado de Demi y esta en varias veces le había rechazado, aunque el seguía en su empeño.
-Pasa algo querida?- dijo el doctor
Al oir la palabra querida, la teniente se quedo bastante colorada como aceptando, que tenía algo con el doctor y que nadie lo sabia, y por lo tanto ella sabría que yo ahora aun le haría menos caso.
-Te he dicho que no me llames así!, recuerda que soy una oficial de mas rango que el tuyo y debes tratarme con respecto!
El doctor un poco perplejo, se giró, y aunque no me reconoció a simple vista ya que yo estaba de espaldas, pudo observar la marca de mi espalda, cosa que me delato.
En un dejavú me vino a la mente, como me hice esa marca en la espalda. Fue huyendo de la colonia de Rin-12 durante las guerras coloniales yo tendria unos 16 años, cuando todos los colonos huiamos de los soldados de la ahora ya exterminada DG, Dominio Global, y nos embarcabamos en las naves, recuerdo como un soldado me cogio por la chaqueta y con un solo movimiento de su pesado brazo me tiró hacia atrás.
-Donde vas sucio colono?- gritó el soldado. –Piensas que podrias escapar en esa nave de refugio? Jajaja!, solto una gran carcajada a la vez que dijo: - Mira chico lo que le va a ocurrir a tu querida nave de reveldes. Un soldado con una armadura mas grande se acerco lentamente con un lanza cohetes. Se tomó sus 10 segundos apuntando a su objetivo y disparó.
Toda mi familia, vecinos, amigos y conocidos de la colonia desaparecieron en una enorme bola de fuego, es curioso por que en solo esos 20 segundos de explosiones, vi pasar una cantidad de recuerdos y pensamientos que podrian haber pasado en un dia normal en horas y horas.
La ira que ahora se iluminaba por mis ojos, era demasiado grande para haber parado a pensar las acciones que podia realizar a continuación. Con fuerza me solte del brazo del soldado y sali corriendo hacía el soldado que portaba el lanza cohetes , el soldado asesino continuaba allí como observando su trofeo, viendo como acababa de arder la chatarra de la nave Geminis de transporte humano.
El Soldado que ya no me tenía retenido se dio cuenta como me avalanzaba sobre su compañero y gritó – Jim cuidado!!- Demasiado tarde mientras corría, saque el puñal que llevaba en mi espalda, ese puñal que tantos trofeos de caza me había dado en las zonas limítrofes de la colonia y tantas cabezas de batics habia cortado.
En una sola pasada y cortando el viento, como un pájaro que vuela en picado hacia el mar para capturar a su presa debajo del agua, rebañe el cuello de aquel soldado.
Vi como sin poder casi hablar se llevaba sus manos al cuello y la armadura comenzaba a bombearle sangre, ante una inminente perdida. Pero era muy tarde el corte era muy profundo y ya se le había escapado media vida.
En esto el soldado que primeramente me había apresado, dandose cuenta de su error y que por su culpa había muerto su compañero, al no retenerme lo suficientemente bien, levanto su rifle pesado de doble cañon y apunto hacia mi.
No sabia que hacer seguramente me hubiera frito si no llega a ser por que algo le dejo paralizado, como la visión, de algo que no te esperas algo que sabes que va a ser tu fin.
Escuché un fuerte estruendo detrás de mi y comenzaron a descender mas de un centenar de naves Falcon con el emblema de los Rebeldes de Nancy.
Unos 100 soldados comenzaron a descender de las naves y se apresuraron a erradicar toda actividad hostil, uno de ellos que se percato que el soldado del dominio aun seguía apuntándome con su hmg , gritó
-Chico! Tirate al suelo!!- yo no estaba mucho por la labor pero involuntariamente mi cuerpo se arrogó hacia el suelo quedandome boca abajo.
Oí el ruido de una granada cuando sale disparada por el tubo de los lanza granadas, de repente un grito sonó, gire un poco la cabeza para ver que ocurria. La granada se habia colado en la armadura del soldado que queria matarme. No pasaron mas de 5 segundos hasta que el artefacto se detonó y redujo todo a chatarra, trozos de metal salieron disparados en todas direcciones por la onda expansiva, todo parecía haber acabado cuando al levantarme note un fuerte dolor en la espalda. Se me había quedado incrustado en la carne un trozo de la armadura del soldado enemigo, y la herida parecia no ser muy grave pero si profunda. El propio trozo de metal me hacia de torniquete y no permitía q saliera mucha sangre.
-Te encuentras bien? Chico- dijo el soldado del lanzagranadas. Aquel soldado era el comandante Stheiner, diez años mas joven eso si.
Mientras pensaba como en la nave principal falcon me extraian el trozo de metal y me hacían todo tipo de preguntas acerca del dominio en la colonia , escuche una voz como si viniera de otro mundo y no paraba de decir..
-James? James!!- exclamó el doctor Flet trayéndome de vuelta a la realidad.
-Disculpe doctor estaba pensando en otras cosas-
-James estás molestando a la teniente Demi?- murmuró en voz aspera.
-Solo he venido a recoger mi armadura, aquí tiene la autorizacion del General Meinor.
-James espera quiero que hablemos- dijo la teniente.
-No! James no tiene nada que hablar contigo Demi, me parece que ya hablemos del tema.
Demi muy enfadada le respondió – Andrew tu no eres nadie para meterte en mi vida y mas si hablo de la persona que siempre he amado y amaré aunque el no me quiera corresponder-
-El doctor se quedó perplejo, pero no cesó en su empeño. –James ya tienes tu armadura no? Como sargento te ordeno que vayas a la zona de embarque con tus otros compañeros-
Demi y el doctor se quedaron dando voces y discutiendo.
Yo ya me había puesto la armadura y mis sensores estaban todos conectados, me pase por armeria para recoger una Hmg Zeus 20 y me dirigí a la zona de embarque, allí ya estaban todos los demas soldados esperandome. Como siempre yo era el ultimo.
-Bien chicos, Ir subiendo que esta noche tendremos fiesta- gritó con jubilo Stheiner.
Poco a poco los soldados iban subiendo a la nave y colocandose los arneses de seguridad de Tanith a Veil no habría mas de doscientos kilómetros, que con una nave Falcon en unos quince minutos ya estaríamos allí.
Las tres naves despegaron al unisono, en una iva la compañía alfa con la capitana Janice como lider, en la beta teniamos a Stheiner y en la gamma iva la teniente Demi. Di gracias al cielo por no tener que estar bajo sus ordenes.
Por una ventanilla podia observar una noche clara y limpia, una de esas noches con luna llena que daba gusto pasear, lo malo del planeta es que tenia 5 lunas y siempre de noche había casi mas luz que de día. Un tipo de luz diferente mas agradable pero perfecto para entrar en combate.
En pocos minutos divisemos la base de Veil con grandes zonas llenas de fuego y humo. Comprendimos en seguida q no se trataba de una mentira, pero tal vez de un motín?
Las naves descendieron suavemente a las afueras de la base ya que las zonas de despegue interiores estaban rodeadas de inmensas llamas de fuego.
Stheiner estaba dando las ordenes y tacticas cuando algo llamo mi atención, algo paso volando a gran velocidad por mi ventanilla, como un rayo. Algo me hizo pensar quera mi imaginación pero me equivoque cuando algo parecido a un murcielago gigante o algo con alas vertebradas, se avalanzo contrá la nave provocando una grieta en el casco exterior.
-Que demonios es eso!!- gritó Timmy el mas joven del grupo. Los marines mas cercanos a la puerta por donde desembarcábamos , ya tenían quitados sus arneses y con velocidad comenzaron a disparar con sus rifles sobre el techo. Parecía como si la criatura no contara con eso y con un alarido bastante desagradable, hizo como si aspirara aire y empezo a desprender por la grieta que se acumulaba en la nave. Stheiner gritó – Todo el mundo!! Colocaros las mascaras de oxygeno!!! Este gas nos va a matar!- A la vez que el se colocaba su mascara había 3 o 4 marines ya en el suelo sin vida, con sangre por los ojos nariz y boca. Ese gas estaba matando a todo el que no llevaba mascara, a Greg y a mi no nos hacia falta ya que las armaduras tenian su propio sistema de respiracion. El comandante Stheiner haciendo gala de su musculatura se arranco los arneses que le sujetaban y cogiendo su escopeta recortada, lanzo dos trabucazos sobre la bestia alada. Esta lanzo un grito de dolor que casi todos entendimos al aire y a la vez que se oia el grito se marcho a gran velocidad desapareciendo en la poca oscuridad que había esa noche.
La capitana Janice abrio la compuerta de la nave manualmente y dijo –Estais bien chicos? Vuestros pilotos no responden.
-Estan muertos dijo Greg,- a la vez que giraba los asientos con los cuerpos de los dos pilotos, asfixiados por ese gas mortal y cubiertos por sus propias sangres y vomitos.
-Cuantos han caido, comento la capitana-
-Siete, Janice, dijo Stheiner.
Aquel ave del infierno nos habia reducido la compañía en solo tres minutos, a que nos enfrentabamos?, que era eso?
Nos apresurabamos rapidamente a bajar de la nave, aun podia ver el boquete que había provocado aquel ave infernal, y los restos de gas por dentro de la cabina de los pilotos.
Algunos que miraron hacia atrás, podían observar como se descomponían a una velocidad acelerada antinatural los cadaveres de los soldados muertos por el gas.
Algunos soldados al ver esta escena comenzaron a vomitar, y esto provocó un efecto rebote, las mismas nausias de ver a los soldados vomitando provocaba vomitos en otros.
AL final el comandante Stheiner viendo aquel espectaculo dantesco, gritó:
Soldados! Ponganse en posición de inmediato, no sabemos a q nos enfrentamos o cuantas mas aves como esas puede haber-
Los soldados poco a poco se iva colocando en posicion ofensiva, la capitana Janice nos informó de que su aparato de lecturas termicas, notaba muchas y de distintas formas. Algo q nunca había visto.
El commandante Stheiner llamó enseguida al mecánico y le mando comenzar a preparar 2 fabricas de torretas centinelas ( “tf “ ) el mecánico ayudado por varios soldados completo su faena en unos 20 minutos, teniamos las naves rodeadas de torres centinelas. Mientras el comandante y la capitana preparaban sus tácticas, los demás empezamos a retirar los cadáveres de nuestra nave falcon y algunos con welders subidos al casco de la nave empezaron a soldarla.
-Roy!- grito Stheiner – Monte un radar de inmediato la capitana detecta unas lecturas muy extrañas.
El mecánico obedeciendo sin rechistar como siempre, descargo de la nave un tubo fuerte y pesado q con varios anclajes engancho al suelo. En unos 5 minutos, tenia todas las piezas del radar acopladas y pudo encenderlo.
El aparato se abrio como un abánico que una vez abierto por completo nos dio una nueva visión del terreno donde estabamos. Nuestro sensores de movimiento pasaron de su estado rojo a verde y ahora podiamos ver algo o alguien que se movía a gran velocidad por dentro del recinto militar.
-Dios mio, que es eso?- gritó Jimmy
Uno de los movimientos que todos podiamos captar era del tamaño de un elefante como minimo y se movia a una velocidad descomunal.
-Chicos por culpa del fuego nuestros sensores deven de estar erroneos- No os refieis mucho.
Grupo Alpha, y Delta venir conmigo -grito Stheiner-, vosotros Beta, soys mis mejores hombres ireis con la capitana al centro del recinto para intentar recuperar el control central y con ello las defensas informáticas.
La teniente Demi se unió a nuestro grupo, cosa que a mi personalmente no me hizo mucha gracia, Greg se puso en cabeza junto conmigo ya que los dos llevábamos las armaduras pesadas y los rifles pesados de asalto. Nos dirigimos a la entrada del recinto militar, cuando un grito nos congelo el cuerpo fue como si alguien estuvieras sufriendo el mayor de los dolores, el ruido venia detrás de la puerta.
-Esta bloqueada señor! No la puedo abrir con los códigos – grito Jeff
-Poner vuestras minas en la parte centra de la puerta y apartaros- grito Stheiner
Acto seguido una vez los soldados habían colocado sus minas Greg con lanza granada en manos lanzo un impacto. Un único impacto que al contactar con las minas, provocó una gran explosión-
Todos pudimos observar el boquete en la puerta, y atónitos vimos como un soldado salía por la puerta con paso lento, todos nuestros rifles apuntaban a su cabeza, no sabíamos que intenciones tenía. Con su mano izquierda sujetaba una pistola la cual uso varias veces disparando a sus espaldas, como si algo le estuviera atacando. Los disparos pusieron mas nerviosos a los muchachos, algunos quitaron el pestillo de seguridad de sus rifles. Cuando el soldado casi había salido por el boquete, se detuvo por un momento, su rostro cambió por completo como horrorizado. De repente las torres centinelas que habíamos montado empezaron a disparar como locas hacia al cielo, el ruido estridente hizo q todos nos volviéramos. Aquel pajaro extraño volvía a atacar. Hizo una pasada muy rápida soltando su gas venenoso, el cual ahora era inservible todos habíamos aprendido la lección y llevábamos nuestras mascaras anti-gas. Las metralletas seguían disparando y conseguimos ver como algo parecido a sangre o un liquido espeso de color verde goteaba desde el cielo. Entonces me acorde del soldado en la entrada mire hacia aquel punto y el espectáculo fue brutal.
Jeff gritó – Pero q demonios!!!- Unos animales parecidos a perros estaban devorando delante nuestro al soldado, eran organismos a cuatro patas con formas deformes y unos colmillos realmente pronunciados. Uno de los perros por así llamarlo se percató de nuestra presencia y rápido como el viento se marcho dando votes, pero los otros tres no. Los otros tres parecía como si nos estudiaran. Uno de ellos con un salto, de aquellos que solo veias en las acrobacias de los antiguos circos se lanzo sobre Jeff, pero un solo cartucho de la escopeta de Stheiner fue suficiente para reducir la alimaña. Los otros dos que miraron pasivamente la muerte de su similar, empezaron a emitir unos rugidos suaves, mas bien risas.
No pasaron muchos segundos antes de que los perros saltarán en trozos de carne por un segundo proyectil lanzado por Greg, esta vez si que acertó en su blanco y a la primera no como en los entrenamientos.
La capitana Janice gritó – Soldado no le he dado la orden de disparar! Que quiere que nos quedemos sin munición antes de llegar a nuestro objetivo?
Greg replico- Pero mi capitana si esos animales han mostrado hostilidad, si el comandante Stheiner no hubiera disparado estariamos viendo las tripas de Jeff-
-No le he dado permiso para hablar soldado- dijo Janice.
Stheiner que no le interesaban nada estas disputas se marcho con las unidades alpha y delta, como aquel que no queria la cosa.
Greg balbuceo.- Sinceramente no se por que tenemos que seguir a una mujer cuando todos sabemos lo que tenemos que hacer-
La teniente Demi le replicó -Tiene algo en contra de las mujeres cabo?-
-Yo? Dios me vendiga, ustedes estan echas para lo que están y no para el ejercito, el ejercito es cosa de hombres y ustedes sobran.- replico Greg
-Y según tú para que estamos echas?- dijo Janice-
-Ya basta- dijo Roy el mecánico -mi trabajo consiste en montar y reparar articulos militares, yo no disparo, y sinceramente no quiero depender mi vida de alguien que se molesta mas en discutir por q sexo tiene mas poder o no. Yo solo quiero q me cubrais la espalda o sea que dejarlo ya.
Acto seguido como si Roy por una vez hubiera sido el propio general, la capitana la teniente y Greg se callaron.
Yo en cambio que no me quise meter en la conversación estaba por mis labores una gran pelota azul en mis sensores recorria el cielo. Yo sabía que era aquel ave que volvía a esperar el momento para atacar. Encendi mi rifle que con su caracteristico ruido de calentamiento alerto a los demás
-Que hace soldado- gritó la capitana
Acto seguido aprete el gatillo apuntando hacia la luna como si me hubiera vuelto loco y disparara a la luz mas clara q teniamos. Un Gemido se escucho en el cielo y algo medio encorvado callo de golpe sobre una de las torretas, destrozandola por completo. Las torretas empezaron a disparar autenticas rafagas de metralla sobre la criatura. Solo cuando esta dejo escapar su vida las torretas pararon.
La capitana se quedó sorprendida por mi actuación, pero no se atrevió a decir ninguna palabra.
Nos acerquemos todos como niños cuando han matado una rata a ver como esta su cadaver. Era el pájaro que tantas bajas había causado.
El doctor se acercó lentamente con su equipo médico y dijo –Chicos no toqueis nada lo metere en el laboratorio de la nave y empezaré a estudiar este ser q jamás habia visto.-
-No lo toque Dr- dijo una voz q desconociamos.
De repente nos percatemos que con la distraccion de mirar al pajaro no observemos como una unidad entera de soldados se habia acercado muy silenciosamente a nosotros. Algunos de ellos llevaban Jet-packs y quiza por eso no les vimos por tierra.
-Me presentaré, soy el Coronel Vince Killroy, y estos soldados son mis muchachos el escuadrón de elite de la seguridad planetaria-
Hacia mucho tiempo había oido hablar de estos soldados, típicos niños huérfanos que los ponían en campos militares realmente duros y de ahí salíaan convertidos en auténticos soldados profesionales.
-Ahora yo tomo el mando- Dijo el Coronel, - Les ordeno que se retiren-
continuación 4
La capitana Janice no daba crédito a lo que veía y oía, por que ella que siempre había sido informada, de todas las situaciones siempre Meinor le informaba y esta vez ella no tenía ni idea.
Los soldados de elite nos rodearon poco a poco. Y el coronel Vince gritó a la vez que con una simple mirada dava instrucciones a sus soldados.
-Les he dado una orden directa, retirense y abandonen este lugar ahora nosotros tomamos el control.-
Greg me miraba fijamente, yo le entendía perfectamente, algo nos querían ocultar ya que era muy poco normal que después de tantas tácticas que nos habíamos aprendido mapas y demás documentos de la instalación, nos quisieran retirar sin previo aviso y los mas extraño es que el escuadrón de la seguridad planetaria, estuviera allí delante de nuestras narices. Cuando solo trataban asuntos extremos de terrorismo planetario.
Killroy gritó de nuevo – Soldados les he dicho que se retiren!! Que les pasa? Son ustedes sordos??-
Uno de sus soldados, le interrumpió, cosa que hizo cambiar radicalmente la cara de Killroy el cual esta acción desagradó bastante.
-Señor noto formas de vida a un movimient…….-
Su vida escapo con esa ultima palabra todos nos quedemos paralizados, acto seguido las torres centinelas se volvieron hacia nuestra posición y empezaron a disparar como locas. Una criatura apareció ante nuestros ojos como si su invisivilidad hubiera desaparecido.
El coronel Killroy gritó –FADEEEEE!!! Todos a cubierto!! Soldados con jets que no escape-
Greg y yo no nos podiamos creer lo que veiamos, primero una criatura voladora que lanzaba gas, luego una especie de perros con garras y dientes mas afilados que los de un león y ahora una criatura de casi unos 2 metros y medio con unas zarpas alargadas como las de una mantis religiosa y todo recubierto por una piel llena de deformaciones.
El ser desencajó su zarpa izquierda de la espalda del soldado ahora ya muerto, parecia como si la municion de las torretas centinelas mas bien le hiciera poco daño. Sin dudarlo un instante mas greg y yo nos alzemos con nuestras pesadas armas y armaduras, teniamos a la bestia a tiro, iva justo a apretar mi gatillo cuando una granada estabilizadora exploto junto a nosotros. Las granadas estabilizadoras se usaban muy frecuentemente en las guerras coloniales para paralizar a los que usabamos armaduras pesadas, habían sido prohibidas al finalizar la guerra ya que decían que desprendían mas irradiación de la que el tratado de Agora había convenido hacia ya decadas.
La granada nos la había arrojado el propio coronel.
-Queremos a la criatura viva, ni se les ocurra dispararle-
La criatura parecía no comprender que pasaba ahí, cosa que era lógica, ella nos habia atacado y ahora nosotros nos atacabamos entre nosotros. El ser humano era el ser mas estupido de la galaxia? Bien podria decirse que si en aquella situacion.
Cuando aquel bicho que ellos habian llamado “Fade” comenzó a parecer notar los efectos de los centinelas que seguían disparando, pero muchos de ellos ya habían agotado su munición por la cantidad gastada contra el pajaro alienígena.
El ser con un salto prodigioso se fue hacía el cielo en lo que parecía ser como un teletransporte, pero entonces pude comprobar como los soldados con jet packs no eran simples aficionados, cuatro de estos soldados siguieron a la criatura hasta los cielos, volviendo a bajar al cabo de un minuto. No pasaron mas de diez segundos cuando la criatura cayó haciendo un ruido tremendo envuelta en una red de contencion alambrica, (Estas redes se usaban en los planetas con vida mas salvaje, y eran perfectas para capturar a criaturas que fueran ofensivas) la criatura comenzó con sus zarpas a desguazar la red pero mas de siete dardos tranquilizantes impactaron en su cuerpo antes de que pudiera al menos hacer un agujero en la red.
La criatura gemia, como ese animal capturado. Al mismo tiempo yo me preguntaba, por que la criatura sabiendo que estaba en desventaja nos había atacado? O realmente no estaba en desventaja?
Todos comprendimos que estabamos en una zona poco seguro y lo mejor era movernos aunque nos resisitamos a la idea de retirarnos despues de haber visto tantas cosas imposibles de imaginar.
5
El comandante Stheiner seguía con su pelotón por la zona indicada el escuadron alpha tenía mucha mas experiencia que el delta por eso quizá se llevo un numero considerable mas alto de este escuadron que del otro. La entrada trasera a la instalación permanecia cerrada junto a un enorme cartel que prohibía el paso a cualquier persona civil o ajena a la instalación.
-Roberts. Rápido weldee esa verja y abrámonos pasos a traves de estos tuneles, estar aquí al aire exterior me da escalofrios- dijo Stheiner.-
Poco a poco el soldado iva soldando las puertas a los conductos internos, y los soldados se preguntaban que seria de sus otros compañeros y que era aquel pájaro, que habia aniquilado a 5 soldados en una sola pasada.
La puerta por fin se abrió y los soldados enciendiendo las linternas de los cascos y armas empezaron a entrar en fila de a dos.
El olor era increiblemente repulsivo, como si mas que una base militar fueran unas cloacas. El sistema aun fiuncionaba, ya que al final se podía ver luz en el hangar de la base ahora situado en frente de ellos a unos cuantos metros de distancia.
Stheiner ordeno a sus soldados que pusieran las minas en la entrada que ellos habían abierto ya que no quería sorpresas por la espalda.
Los soldados continuaron avanzando lentamente, al llegar al hangar el espectáculo fue grotesco. Cadáveres y mas cadáveres colgando del techo, casi todos mutilados. Algunos aun seguían desangrándose Uno de los soldados pudo comprobar como una criatura, algo parecido a un perro viscoso sin pelo y con partes deformes estaba construyendo algo parecido a una torre que se tragaba el gas de uno de los recursos naturales ocupados por los militares de la base.
-Que es eso señor? – Stheiner dijo no lo se pero sea lo que sea esa criatura parece sacar beneficio del gas silíco como nosotros.- Entonces andy uno de los soldados mas novatos y recien llegados a la academia choco con algo. –Que demonios?- exclamó, cosa q advirtio a la criatura que trabajaba en aquel recurso y de pronto se hizo invisible-
Stheiner se acercó al soldado y dijo – Que le ocurre soldado, para que ha delatado nuestra posición-
EL soldado sin mediar palabra cogió la mano de Stheiner y la paso por delante de el, a simple vista solo había aire, pero Stheiner noto algo. Una masa viscosa con pequeñas antenitas en su cabezal al rozar una de estas antenas todas se movieron y de golpe se hizo visible delante de los soldados lo que parecia ser una torre carnosa de no mas de 1metro y medio, -Dios mio que aberración es esta- dijo un soldado.
Stheiner dijo .- Debe de ser algun metodo de camuflaje para esas bestias, rapido Jail llama al mecánico por la radio y que desde el radar haga un scaneo digital de nuestra zona, quiero saber de que estamos rodeados.
La radio chirrió – Comandante? Es uste señor??-
-Sí respondio Stheiner que ocurre?-
-Las tropas de eliete de la SP estan aquí nos ordenan q nos retire….- se corto la comunicación , Stheiner no daba credito a lo que acababa de escuchar.
La radio se encendió de nuevo y una nueva voz aparecio al otro lado del auricular-
-Soy el coronel de la tropa 21 de elite de la SP, Vince Killroy. Su trabajo aquí ha terminado, les ordeno que regresen aquí de inmediato, si presentan cualquier negación de mis ordenes seran tratados como enemigos-
-Pero q? Q demonios estas diciendo maldito chalado- Respondio Stheiner.
-Meiner no nos ha informado de que ustedes sean quien tengan que relevarnos y por lo tanto no obedecere sus ordenes-
-Mire soldado conozco su historial y sus conflictos de disciplina y…- la voz del coronel killroy se apagó y un grito un poco mas lejano se escucho desde el auricular – Señor el fade se ha convertido en un huevo y--- la comunicion se corto-
-Fade? Huevo?- Se preguntaba Stheiner, q demonios estaba pasando alli.
-Chicos parece ser q no tenemos scaners, vamos a eliminar esta torre y sabremos si era lo mejor o no.
Se acercaron 2 soldados con sierras mecanicas cortaron las raices de la torre y toda la sala cambió de aspecto, como si hubieran entrado en una nueva dimensión. Había torres por todos lados algunas con formas de seta gigantes otras con puas y algunas con membranas que parecian coletas…. En medio del hangar algo realmente gigante como una bolsa de materia viva mas bien un estomago descomunal el cual parecía respirar por si solo colgaba del techo por unas gruesas membranas.
Stheiner balbuceó algo atónito –Chicos, por el amor de dios no toqueis nada, no quiero encontrarme con ningunas sorpresa desagradable-
No acabó de decir sus últimas palabras cuando la criatura volvió a aparecer por la falta de camuflaje, acto seguido el ser alienigena empezó a emitir un sonido chirriante que podía incluso romper los pocos cristales que quedaban en el hangar. A Stheiner esto no le gusto nada y sin pernsarselo 2 veces lanzo una granada sobre la criatura. La onda expansiva de la granada revento a la criatura pero también afecto a una de las torres en forma de seta gigante. Esta con un ruido característico comenzóa a autocurarse. Uno de los soldados seguía inspeccionando las torres con puas en la parte superior. El “gran estomago” como asi ellos lo llamaban seguía inmovil. Pero de repente sin que ninguno de los soldados empezo a bombear como si estuviera cogiendo aire. Acto seguido todas las torres con pinchos se pusieron firmes.
EL soldado q no daba credito a lo que veia se callo hacia el suelo de culo, por el susto que le causo la torre. Sus compañeros aunque recelosos y cautos se empezaron a reir. A Stheiner no le gustaban las risas que oia y mas cuando las risas pararon de golpe. La torre habia empezado a descargar sobre el soldado sus púas del tamaño de balas, a una velocidad sobrenatural. El soldado yacia muerto en el suelo y los soldados que antes reian ahora gritaban el nombre del soldado muerto. Stheiner notaba en el aire que algo iva mal. y realizo cuatro pasos hacia atrás cuando de repente de la torre con forma de T empezo como a teletransportar todo un ejercito alienigena. Ante sus ojos y los de sus soldados aparecierón mas de veinte perros de los que el antes habia matado uno. Pero eso no era lo que mas miedo le daba entre las torres podia divisar algo realmente grande y que le estaba mostrando su muerte.
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