Mega Drive cumple 30 años este octubre y Sega anunció en abril que, para celebrarlo, lanzaría otra versión mini de su consola más popular.
Las malas noticias no tardaron en llegar: ese modelo solo estaba previsto para Japón y a cargo estaba de nuevo AtGames, la compañía responsable de varios intentos previos que habían resultado muy decepcionantes.
Tras meses de silencio absoluto al respecto, Sega ha aprovechado el anuncio de la PlayStation Classic para confirmar que no hará la competencia a Sony y no lanzará su Mega Drive Mini este año.
La buena noticia es que este retraso supone que Sega va a incluir a varios desarrolladores internos en el proceso, probablemente deshaciéndose por completo de AtGames y que, encima, la miniconsola saldrá también en Occidente con un lanzamiento simultáneo en todo el mundo.