Microsoft ha compartido sus resultados financieros correspondientes al cuarto trimestre perteneciente al año 2018, y mientras sus ventas de hardware han sufrido un descenso del 33%, los servicios de suscripción de la compañía han experimentado una importante subida que llega para contrastar la bajada en las ventas de Xbox.
Por otro lado, las ventas de videojuegos registraron un aumento del 5% en los ingresos de la compañía, lo que se traduce en 2363 millones de dólares. Esta cifra puede ser consecuencia de que los usuarios activos mensuales de Xbox Live aumentaron un 7% interanual, llegando a ser 63 millones de suscriptores (en comparación con los 59 millones de jugadores registrados en el mismo periodo del año pasado).
Eso sí, se desconoce cuál ha sido el impacto exacto de servicios como Xbox Game Pass, pero dadas las cifras positivas registradas parece que este servicio de suscripción ha reportado los beneficios que Microsoft iba buscando.