Lo que era una realidad en la versión Elite del mando de Xbox One ahora también es posible en la versión estándar, aunque no es tan flexible a la hora de hacerlo.
La versión estándar permite el remapeo de los botones siempre que sea a modo de intercambio. Por ejemplo, puede hacer que la X funcione como si fueses la Y. No puedes desactivar botones ni hacer que un botón haga varias funciones a la vez ya que son cualidades reservadas solo para el mando Elite.
Además, solo podrás almacenar una configuración a la vez frente a las 256 permitidas en el Elite. A la hora de mover tu configuración, en el caso de la versión estándar no se trasladará a PC si decides usar el mando ahí, cosa que sí pasa con el Elite.