“Si las puertas de la percepción quedaran depuradas
todo se habría de mostrar tan cual es: infinito” William Blake
Las puertas de la percepción (The doors of perception, 1954) es un ensayo de Aldous Huxley. En él describe sus experiencias alucinógenas producto de la ingestión de mescalina, uno de los alcaloides psicoactivos del cactus peyote y principal sustancia responsable de sus efectos psicodélicos.
Una de sus conclusiones es que el cerebro humano filtra la realidad para no dejar pasar todas las impresiones e imágenes existentes en la verdadera realidad, las cuales serían imposibles de procesar. De acuerdo con esta base, las drogas pueden reducir el filtro que fabrica nuestra cerebro para poder experimentar parte de la realidad que no podemos ver, o en su versión metafórica, abrir las puertas de la percepción.
Otro punto es su crítica a la cultura occidental, que es imposible de escapar de su base, el lenguaje y por ende la razón, para abrazar lo no verbal e inherente de la esencia humana. Además de otras reflexiones también repasa el trato de la mescalina en varias civilizaciones a través de su historia.
Como ensayo complementario tenemos Cielo e infierno (Heaven and Hell, 1956), donde continúa su teoría de que la mescalina logra tener acceso a lugares de la mente, propia o ajena, que han permanecido ocultas o cerradas. En esta ocasión añade que es debido a filtros creados a partir de las convenciones sociales.
También comenta algunas observaciones sobre el estado mental de los esquizofrénicos o los delirios debido a la desnutrición, que en cierta parte son formas naturales de tener estados visonarios sin el activador de sustancias lisérgicas.