Sois hilarantes, lo único que sabemos es que este chico empieza el vídeo llamando a su madre retrasada y gilipollas y que, mientras esta le dice que se vaya a la cama, este pasa de ella. Quién sabe, a lo mejor esta madre tiene que ir a dormir, quiere silencio y no quiere estar escuchando a su hijo hablar sobre un juego mientras le habla a una cámara. Quién sabe, a lo mejor esta madre ha sacado adelante esa casa y a ese hijo y, solo por eso, lo que diga debería ser obedecido de inmediato. Quién sabe, a lo mejor solo quiere que el muy ogro se afeite porque menudas pintas de naufrago lleva, producidas seguramente por sus largas jornadas de reclusión jugando al LoL mientras come Doritos.
Seguramente esta madre no le cruce la cara porque el muy gordo, solo por su condición de gordo, es físicamente superior; pero se merece encontrarse el ordenador en el contenedor más cercano junto con sus maletas. Que justifiquéis este tipo de trato hacia una madre, sea cual sea el caso, es lamentable.