Hola a todos.
Después de estar unos meses sin gato en casa, en febrero adoptamos un gato nuevo y optamos por ir a por un gato adulto. De entre los que había elegimos un cruce de garto europeo y persa de 6 años, bastante bonito, muy cariñoso, pero que tenía un historial reciente un poco turbio: lo habían adoptado dos veces y lo habían devuelto a la protectora de animales.
El caso es que es bastante cariñoso y generalmente es muy independiente, con una excepción: tiene la manía de no poder comer si no está acompañado por alguien. cuando le hemos dejado mucho tiempo solo en casa (1 día y medio máximo) al final ha terminado comiendo sin problema, pero si está una mañana o una tarde solo en casa no toca el pienso y en cuanto alguien va a la cocina le acompaña y come con bastante ansiedad.
El problema viene a las noches, y es que cada dos o tres horas quiere ir a comer y se pone a saltar y a jugar con los pies de alguno de nosotros, a frotar la cabeza en la cara y hacer diversas perrerías hasta que alguien se levante y le acompañe a comer a la cocina. Esto está empezando a ser un problema porque últimamente la toma con mi madre y veo que no termina de descansar por las noches. El recurso que yo utilizo es apartarlo o pasar de él, pero solo consigo que se vaya a incordiar a otro, generalmente a mi madre, que termina claudicando y acompañándola a comer.
Es un gato que vino a casa con bastante ansiedad, el haber ido en casa en casa seguramente le afectó bastante y se le notaba nervioso e intranquilo, pero con el tiempo ha ido relajándose y adaptándose a su nueva casa, menos en este aspecto, que no hay manera de que coja confianza para comer solo.
¿Se os ocurre alguna forma de hacer que cambie esta actitud?