¡Tenéis que probarlo! ¡Os va a cambiar la vida!
Grabad o bajaos de internet algún vídeo de rap americano (de estos que salen un montón de flipaos bailando en un bar todos apretados), bajad el sonido y poned de fondo el sonido de un documental sobre monos.
¡Oh Dios mío! ¿No es genial?
Ah, por cierto, no tengo nada en contra del rap [...] pero es curioso y divertido.