Solo Rap y más Rap

No tientes al unico casquillo de esta ruleta rusa:
¿Se viene por motivos o el destino es una excusa?
Peleado con mi musa pero para mí nunca es tarde.
Te escribo esta postal desde mi hostal al acostarme:
Traeme suerte!

Libera mi mente de esas vertientes
de números pendientes, rodeado de serpientes.
Riega de autoestima a los míos cuando despierten,
y protege las murallas de mi fuerte estando ausente.

Suerte a los de siempre, a los que me enseñan los dientes
A los que lo sienten cuando se arrepienten.
No quiero mas sonrisas que te mienten por el bien de…
Ya tengo cada finde un nuevo fan que me defiende

Soy un artista alejado de las listas
Cerca del listón, lejos del pisto me vuelve triste.
Infeliz, y cada vez más triste.
Como cuando sueñas, te enamoras, te despiertas y no existe.

Lejos de tu círculo vicioso, vida arpía,
quiero luz en los asfaltos a los ojos de mi guía.
Más sequía, sí,
pero no hagas brechas en mi vicio.
Porque a veces me desquicio y aún escribo con sangría.

Jazz melodía a las tres y media; y no del medio dia.
Da igual, mañana será otro dia tráeme suerte.

A todas las que me abrieron su coraza traeles suerte,
ya no creo en el amor pero querría volver a verte.

Borracho un martes, nací un 13.
Falto de suerte por mi parte, pero parto desde que empezé.

Paso las horas, los dias, cuento los meses...
Diseñado para el deseo pero nada me apetece
Porque el cielo hoy tiene un pobre color ocre, pero logro
poner de acuerdo al ángel y al diablo sobre mis hombros.

Te odio inspiración cuando te fugas con otro.
Dejé de rezar, vivo al azar, como George Cockroft.

La vida es corta y la suerte es lenta:
cada vez que se mete esta tentando a la ruleta,
y un tiro por la culata puede enviarte a la cuneta.
Siempre escondo un amuleto en el fondo de mi maleta.

Maldigo a mis rivales;
no ahuyentaran nuestros males ni con talismanes.
Aunque el reloj nunca se pare, seguiré brindando en bares:
por lo que la suerte nos depare, hasta que la muerte nos separe.

Y así somos felices, 13, bendice mi fé,
Gerard produce y nadie me predice en el M-i-c,
y hay esperanza, aunque sólo algunos la alcanzan,
Rafa y Fransanz a la vieja usanza.