"Kuando muncho escurese es para amaneser". Este es el lema de El Amaneser, el único periódico del mundo que se publica enteramente en ladino o judeoespañol, la lengua de los sefardíes, que se conserva hasta hoy en Estambul.
De hecho, la disminución del número de sefardíes que aún conservan el español del siglo XV como lengua materna hace pensar que oscurece el horizonte de este colectivo, pero para la fundadora de El Amaneser, Karen Gerson Sarhon, eso es más motivo para dedicarse a conservar la riqueza cultural que contiene este idioma.
Impreso a color, con 24 páginas y de periodicidad mensual, El Amaneser se publica desde el 2005 para recuperar la tradición de la prensa sefardí que florecía en la capital otomana desde mediados del siglo XIX y para servir de nexo de unión entre todas las comunidades sefardíes del mundo, explica Sarhon a Efe.
«Hasta entonces, la única publicación enteramente en judeoespañol era Aki Yerushalayim, que se hace en Israel, pero que sale sólo dos o tres veces al año; luego hay algunas revistas en Francia o Bélgica que tienen algunas páginas en judeoespañol», resume Sarhon.
La revista, que cuenta con un par de ordenadores, tiene su sede en el llamado «Sentro de Investigasyones sovre la Kultura Sefardi», ubicada en un piso del barrio de Nisantasi en el centro de Estambul, sin placa en la puerta, pero siempre vigilada por un atento portero. La comunidad sefardí de Estambul, unas 15 000 personas, no tiene problemas de convivencia con los demás ciudadanos ni sufre ningún tipo de acoso, pero desde los atentados del 2003 contra la principal sinagoga de la ciudad, una discreta vigilancia rodea todos sus lugares de reunión o culto.
Se trata de la mayor comunidad de judíos en un país con mayoría de población islámica, seguida de Irán (11 000) y Marruecos (3000), pero ya son muy pocos quienes conservan el ladino, y la mayoría habla turco como lengua materna. El semanario de la comunidad, Shalom, redactado en turco, tiene 4000 suscriptores, que reciben también El Amaneser como suplemento mensual, explica Sarhon.
«Asta sierto punto, el ladino sirve komo lingua franca entre los judios sefaradim ke oy en dia estan muy despersados en la mayoria de paises del mundo», reza un artículo. Al uso de la K y la falta de C y de tildes, amén de un distinto empleo de B y V, se añaden algunas palabras de castellano antiguo como meldar (leer) o de raíz turca o árabe, como karar (decisión).
Pero las palabras turcas no suponen ningún problema a la comprensión de la revista en el ámbito sefardí, dado que todos comparten esta herencia, sean oriundos de Estambul, de Salónica, Sofía o Sarajevo. «Kale ke entiendas ke el judeoespañol es una lingua otomana», recalca Sarhon: únicamente es común a los sefardíes que se asentaron en el Imperio otomano, desde los Balcanes hasta el suroeste de Anatolia.
Sarhon lamenta que el judeoespañol no tenga Academia propia y que la Real Academia Española tampoco haya incorporado a su Diccionario las voces que sólo se conservan entre los sefardíes, aunque algunas incluso consten en ediciones de siglos pasados, antes de caer en el olvido en España. «Si incorporan palabras que se usan sólo en Argentina, Uruguay o Perú, también deberían tener las nuestras, porque es un uso correcto del español», defiende la directora del periódico.
De hecho, algunas de las palabras que un lector español no reconocería sí figuran en la RAE: meldar (leer), huerco (diablo), chapeo (sombrero), siempre con la indicación «antiguo» o «poco usado», pero nunca con la de «uso sefardí».
Noticia completa: Aurora-Israel.co.il
¿Qué opináis? No sabía nada de este idioma y me he quedado a cuadros. Para que luego se diga que los canis de instituto son unos analfabetos y unos ignorantes por hablar poniendo Ks en vez de Cs, y resulta que lo que son es expertos en judeoespañol x'D