Pues eso el otro dia asesinaron a un Barra Brava de River en la Salida de un Gimnasio, se ve que actualmente esta dividido en dos bandos los Barras Bravas de River y cada cabezilla opta por conseguir el poder sea como sea.
Ahí va la noticia.
La pelota ahora está en manos del juez
Luis Rodríguez debe definir si unifica las causas del crimen de Acro con la de la batalla de los quinchos. Y si cita a Adrián para que ratifique su acusación a Alan.
El barra Adrián Rousseau prometió detallar todo lo que pasó en la batalla de los quinchos.
El barra Adrián Rousseau prometió detallar todo lo que pasó en la batalla de los quinchos.
Adrián Rousseau rompió el silencio y sin rodeos acusó a Alan Schlenker de "organizar" la emboscada en la que asesinaron a Martín Gonzalo Acro. Esta declaración tiene que ser tenida en cuenta por el juez Luis Rodríguez y según le aseguraron a Olé fuentes tribunalicias, en las próximas horas lo citarán a declarar para que ratifique o se rectifique de sus dichos a la revista Veintitrés, en la que también aseguró que, a diferencia de lo que había hecho cuando fue citado por el fiscal José María Campagnoli, ahora está dispuesto a dar su versión detallada de lo que fue la "batalla de los quinchos" y que no tendrá problemas en "mandar en cana" a los responsables de la muerte de su amigo.
Este viraje en la actitud de Adrián Rousseau puede ser determinante también para el futuro de la causa. Por ahora los incidentes de los quinchos están siendo investigados por el juez Mauricio Zamudio, pero ya hubo un pedido formal de Campagnoli para que Rodríguez unifique las causas porque la conexidad estaría dada por el delito más grave, que es el del homicidio de Acro. Según pudo investigar Olé, Rodríguez recién estaría en condiciones de hacerlo luego de tener pruebas como los mensajes al celular de Acro, los resultados de dos allanamientos en la zona norte en los que se habrían identificado a los vehículos que se utilizaron para el ataque (un Fiat Uno bordó y una camioneta blanca tipo Kangoo) y una agenda del barra asesinado. Estas pruebas, más las declaraciones de Rousseau, son más que suficientes como para vincular un hecho con el otro.
Sin esta definición clave entre ambos jueces todo quedará supeditado a una puja de competencias en manos de la Cámara, lo que puede también suponer una dilatación en las investigaciones que hasta ahora viene llevando adelante Campagnoli para uno u otro magistrado.
Si Rousseau cumple con su amenaza de prender el ventilador, el juez tendría por lo menos datos concretos para pedirle al fiscal que cite a los hermanos Schlenker, por lo menos para que digan qué estaban haciendo en el momento del homicidio. "Alan ya tiene su coartada, pero en una reunión contactaron a diez sicarios", le había dicho Adrián Rousseau a Veintitrés en la misma nota.
Rodríguez está en la mira. El partido, según el Gobierno, no se jugó por su indefinición. Ahora tendrá que empezar a atar los cabos para ver si logra dar con los asesinos de Acro.
