https://www.elmundo.es/madrid/2018/12/19/5c195950fc6c835f7c8b45e2.html
La Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Madrid, organismo público dependiente del Ayuntamiento de la capital, ordenó este martes la «retirada urgente»de las marquesinas de sus autobuses de una campaña de promoción del uso del Metro, cuya gestión corresponde, a su vez, al Gobierno regional. Todavía ayer a las tres de la tarde, en la de la Puerta del Sol, un cartel con la imagen del Rey Melchor proclamaba que «el secreto para llegar a tiempo» es viajar en el suburbano; cuatro horas más tarde, en ese mismo espacio, ya sólo se podía ver un cristal pelado sin rastro ya de tal mensaje. La encargada de transmitir al Ejecutivo de Ángel Garrido la decisión del equipo de Manuela Carmena ha sido JCDecaux, la adjudicataria de la explotación de los anuncios. En una comunicación con fecha del 18 de diciembre, a la que ha tenido acceso EL MUNDO, argumenta que «la realización de acciones especiales fuera de los espacios publicitarios destinados para este objetivo requiere de la autorización de la EMT». «Esta autorización está solicitada y aprobada, pero con la creatividad propuesta inicialmente, del centenario de Metro, y por error no se solicitó la aprobación con la nueva creatividad propuesta.
Este error hace que, tras el requerimiento de la EMT y sin aprobación de ésta, actualmente estemos obligados a la retirada de la campaña que se está produciendo en estos momentos», señalan en la multinacional francesa.
En la Comunidad niegan que se cambiara sobre la marcha el objeto de esta acción publicitaria, en la que hasta este martes se podían ver al menos a dos de Sus Majestades de Oriente por separado animando al uso del suburbano desde las marquesinas de los autobuses. Aun en el supuesto caso de que se hubiera producido el error al que alude JCDecaux, no entienden que, una vez instalados, se haya ordenado la «retirada urgente» de unos anuncios que califican de «muy blancos» porque consideran que están exentos de cualquier atisbo de polémica. «Sorprende que una institución que hace gala de una política de movilidad sostenible boicotee y censure una campaña institucional cuyo objetivo principal es el fomento del transporte público por parte de los ciudadanos», explica un portavoz de la Comunidad de Madrid. «No entendemos que una administración esté en contra de un campaña que, en este caso, promueve el uso del Metro de Madrid», añade. Este periódico ha tratado de contactar con la EMT, sin éxito, para conocer su versión de los hechos.
La campaña para la promoción del uso del Metro tenía una duración prevista de siete días, del lunes 17 al domingo 23 de diciembre, con un presupuesto público de 66.550 euros. Una parte de esta suma de dinero se había gastado ya en la fabricación de unos vinilos especiales que cubrían todo un lateral de las marquesinas en las 10 paradas en las que se habían instalado: aparte de en Sol, en las plazas de Colón, Jacinto Benavente, Cibeles e Isabel II, en las calles O'Donnell, Narváez y Princesa, en el paseo de la Castellana y en la avenida de Concha Espina. Éste no es el primer rifirrafe entre instituciones madrileñas a cuenta de la publicidad en lo que va de legislatura. El pasado mes de marzo, el Ayuntamiento vetó la imagen de la entonces presidenta regional, Cristina Cifuentes, en una campaña contra la violencia machista en contenedores de reciclaje, aunque en esta ocasión la decisión se adoptó antes de que se instalara.
