Si algo está poniendo de manifiesto esta crisis es:
1º: La estupidez humana no tiene límites
2º: La convivencia de tres sistemas administrativos distintos es manifiestamente ineficiente en situaciones de extrema gravedad, no hay coordinación ni unidad de acción, es un puto cachondeo
3º: La ineptitud de los políticos ya era conocida, pero ahora también es conocido que son capaces de anteponer sus intereses políticos y partidistas a la salud pública del país y a las vidas de miles de personas.
En mi humilde opinión, cuando todo esto acabe, deberíamos de poner una guillotina en cada plaza de cada Ayuntamiento de España y rendir cuentas.