Yo pensaba que cuando se te empalmaba se te ponía el pene en horizontal y que la vagina también estaba en horizontal como si fuera otro ombligo. Y creía que tenía el mío roto porque se me iba demasiado arriba y no iba a poder tener hijos.
También pensaba que si me acercaba mucho al desagüe de mi piscina (Un agujero por el que cabía un niño flaco como yo) me iba a llevar a otro mundo. Luego mi madre me dijo que solo moriría y empecé a odiar las piscinas.