Un empresario que compró en subasta un monovolumen intervenido a un traficante en 2008 descubre que llevaba once kilos de droga en el neumático de recambio
De un simple pinchazo a tener que demostrar que no es un narcotraficante. Ése sería el resumen de la rocambolesca historia protagonizada por un empresario valenciano que el lunes estuvo a punto de ser acusado de un delito de tráfico de estupefacientes después de que apareciese un alijo de hachís en la rueda de recambio de su monovolumen.
Todo había comenzado tres años antes, cuando agentes de la Guardia Civil del puesto de Puçol registraron un Opel Zafira en octubre de 2008 tras sospechar de la actitud de su conductor. En el registro del vehículo, los guardias detectaron un alijo de 16 kilos de hachís, repartidos en pastillas, que el conductor traía desde Marruecos. El hombre fue detenido por un delito de tráfico de drogas y el vehículo, confiscado por orden judicial. Después, fue confinado en un depósito judicial, como es habitual en estos casos salvo que un juez autorice el uso del coche a las fuerzas de seguridad.
Dos meses circulando con droga
Y allí pasó casi tres años, hasta que hace un par de meses, un empresario valenciano lo compró en subasta después de que fuese tasado por un perito judicial. Desde entonces, el flamante dueño del monovolumen ha estado circulando con el vehículo con absoluta normalidad.Hasta que el pasado lunes, a última hora de la mañana, el hombre sufrió un pinchazo cuando circulaba por un camino sin asfaltar de Silla. Cuando se dispuso a colocar la rueda de recambio, descubrió que ésta estaba deshinchada, por lo que llamó a uno de sus empleados para que acudiese a ayudarle.
Mientras el hombre permanecía junto al coche, el operario se desplazó a una gasolinera próxima para hinchar la rueda. Sin embargo, en ese momento descubrió que el obús, la pieza que cierra la válvula, había desaparecido, por lo que no se podía ni introducir ni extraer el aire del neumático.
Así las cosas, el trabajador decidió ir a buscar ayuda a un taller de reparación y venta de ruedas. Cuando la examinaron, comenzaron a sospechar que algo sucedía, ya que el peso de la rueda era anormalmente alto. "El empleado incluso llegó a pensar que podía estar llena de barro", explicó un testigo presencial.
Una sustancia "compacta"
La sorpresa llegó cuando extrajeron el neumático de la llanta "y vieron que asomaba una sustancia compacta, de color chocolate". Eran once kilos de hachís, en pastillas, que habían sido ocultadas tres años antes en ese lugar y que la Guardia Civil no descubrió en una primera revisión.
A partir de ahí, el dueño del taller mecánico y el del vehículo alertaron a la Guardia Civil y a la Policía Local de Silla, que guardó momentáneamente la rueda hasta que el propietario del coche la entregó a los agentes del cuartel de Silla. Además, la Guardia Civil retuvo el Opel Zafira hasta la mañana siguiente supuestamente pa?ra revisar a fondo el vehículo.
Ya me jodería, tengo droga en el coche y no la vendo. 10.000€ Perdidos como si nada xD